Siempre es interesante escuchar a Emiliano Martínez. "Dibu", el arquero emblemático de la selección argentina campeona del mundo en Qatar 2022, tuve una charla íntima con Sergio Goycochea a través de los micrófonos de D-Sports Radio.

El próximo desafío de la Selección de Lionel Scaloni y será ni más ni menos que la próxima Copa América, a disputarse los Estados Unidos, y es una situación que motiva al guardavallas: “Defender el título es hermoso. Ya hablamos con varios de los chicos incluso con aquellos que salieron campeones del mundo pero no pudieron ganar la Copa América”. Y argumentó: “nosotros ganamos la Copa América sin gente solo con algunos presentes en la final. No es una Copa más. Están tomando como algo muy serio en el plantel”.

La Copa América en particular es una competición muy afecta a los sentimientos del "Dibu", ya que fue la competición en la cual tuvo su presentación en sociedad con la albiceleste: “Estamos todos re ilusionados. La primera me generó mucha responsabilidad porque era un test para mí. Con la presión de que si las cosas no me salían bien y va a haber un gran recambio. A la hora de jugar ganamos todo lo que se puede ganar como futbolista internacional y ahora hay que mantener eso. La verdad estoy más ilusionado en esta Copa América que en la primera que jugué”.

El gen competitivo es algo que distingue al jugador argentino y Emiliano Martínez no es la excepción: “Nadie se puede relajar. Todos ponemos en juego nuestro puesto. Eso es lo lindo que tiene la Selección: todos tenemos que ganarnos nuestro puesto. Nosotros jugamos de la misma manera sea contra quien sea, en la cancha que sea. Ya sea contra El Salvador, contra Brasil o contra Francia en el Lusail. Todos mis compañeros pelean por tener el arco en cero, porque sabemos que teniendo el arco en cero nosotros, un gol vamos a meter. Solo Uruguay nos pudo meter goles y porque jugaba en una cancha que lo favorecía, como la de Boca que es más chiquita. En la de River, hubiera sido diferente el partido", analizó el arquero.

Así como para los delanteros es importante terminar un encuentro habiendo anotado, para el hombre bajo los tres palos es clave no haberlos recibido: "Peleamos por tener el arco en cero y los arcos en cero acá son los que más disfruto. Quiero seguir teniendo la valla en cero el hecho de haber ganado algo no me ha hecho perder la motivación”.

Asímismo, el arquero de la selección argentina analizó algunos de los encuentros del camino para lograr la tercera estrella: "con Arabia tenía una bronca enorme. Tuvieron dos tiros al arco y me convirtieron dos goles. Y yo la bronca me la sacó entrenando, así que estuve dos o tres horas entrenando. Cuando llegué al partido con México, tengo mi primera atajada estando 0-0 ahí. Fue cuando dije 'acá empezó mi mundial'", describió el marplatense, quien destacó: “Mi mejor partido sin duda fue ante Croacia. Estuve seguro bien ubicado sin dar ningún tipo de rebote fue mi mejor encuentro”.

Lograr un campeonato del mundo es la meta máxima para cualquier futbolista. En ese sentido Martínez le da un lugar de destaque eterno a lo logrado: “después del mundial me dije pase lo que pase en mi carrera ya lo más difícil lo superé. No solamente por ganar el mundial sino por ganarlo de la manera en la que lo hicimos. Encaré la final con la mentalidad de que pase lo que pase la tenía que ganar”.

Además, recordó un hecho que sucedió ya con la tercera estrella en el escudo argentino: “En un parate, luego de lo que fue el festejo del mundial, nos dijimos que éramos inmortales porque pase lo que pase nadie nos va a sacar la estrella. Nos van a recordar por siempre. Ese orgullo no nos lo va a poder sacar nadie hasta el día que nos vayamos de este mundo”.

Al ser consultado por la posibilidad de estar en la cita de París para los Juegos Olímpicos, el arquero se mostró predispuesto: “somos muchos los que queremos ir a los juegos olímpicos. A mí me interesa ir. Sé que Cuti y Ota tienen ganas de ir también todos queremos ir”.

Por otra parte el arquero argentino sostuvo que la mayoría de los equipos que lo enfrentan van con otra mentalidad al saber que se se está midiendo con los últimos campeones de la Copa del Mundo: “Es verdad que todos le quieren ganar al equipo campeón del mundo. Pero también es cierto que no respetan más. El que más nos presionó en estos amistosos fue Australia. Los equipos en general nos respetaron mucho”.

En tono reflexivo "Dibu" se dio un tiempo para analizar el camino recorrido. Y si bien está satisfecho hay algo que sea reprochado en varias oportunidades: “me hubiera gustado jugar más joven en la selección. Quizás me arrepiento de algunas decisiones que había tomado estando en los clubes. Quizás debí haberme ido antes cuando tenía oferta de otros clubes y poder llegar a la selección un poco más joven. Aunque la realidad es que no puedo rebobinar todo y volver a cambiarlo porque capaz no sería campeón del mundo. Siento que cada vez entiendo más el juego en esta parte de mi carrera. Creo que esta Copa América lo que me va a decir si estoy mejor que en la anterior”.