Recién ayer a las 22, se público el Decreto de Necesidad y Urgencia que especificaba los requisitos necesarios para el regreso de los espectadores a los estadios del fútbol argentino en todas sus categorías.

Más temprano, AFA, haciéndose eco de los anuncios de los Ministros Vizzotti y Lammens en conferencia de prensa, publicó el detalle de los protocolos que se deberían cumplimentar a partir de hoy, cuando comience una nueva fecha de los torneos. 

Sin embargo, la confusión se hizo presente hoy en el Ricardo Puga, el estadio de Atlas, cuando llegaron los efectivos de la policía de la Provincia de Buenos Aires y los colaboradores de Central Ballester dispuestos a vender entradas para el partido que el equipo azul y amarillo debía jugar como local ante Yupanqui.

La policía le comunicó que, según ellos, el público en los estadios de la divisional "D" debía regresar el próximo 5 de octubre y no hoy, algo que contradice el DNU y los respectivos comunicados.

Ante este panorama, el presidente de Central Ballester, Donato Lanzilotta, dialogó con TyC Sports y confirmó su confusión. "Nosotros acatamos lo que dice AFA, pero la policía nos dice que no tiene efectivos disponibles para el operativo. Recién me comuniqué con Tapia y me dio la razón", concluyó el mandamás del equipo del oeste. Por lo pronto, hubo público en las tribunas de los otros tres partidos de la divisional disputados este viernes: Centro Español 1 - Liniers 4, Muñiz 1 - Lugano 1 y Juventud Unida 2 - Sportivo Barracas 2.

Una perla en el regreso del público 

El puntero de la Primera "B" Metropolitana, Flandria recibió en su cancha, con su público a Argentino de Quilmes y no tuvo compasión. El "Canario" derrotó por 7-2 al "Mate". La particularidad la marco Lautaro Gordillo, delantero surgido de las inferiores de Ferro, marcó cinco de los goles del equipo de Jauregui y tenía la posibilidad de alcanzar a "Juanchi" Taverna que tiene el record histórico al haber marcado 7 goles en un partido (Banfield 13 - Puerto Comercial 1). Pero el entrenador Andrés "Lobo" Montenegro, un viejo goleador del ascenso, decidió reemplazarlo a los 18 minutos del segundo tiempo. Inexplicable.