"Pablito" Moyano mete sus internas familiares y sus problemas judiciales en Independiente
El Vicepresidente del Rojo se quejó aireadamente del arbitraje de Darío Herrera ante Boca, pero no le apuntó al colegiado. Señaló, directamente, a Mauricio Macri y Chiqui Tapia. Sin embargo, ambos enojos tienen una razón de ser que apenas roza de costado a la entidad de Avellaneda.
(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) Casi que habrá un consenso generalizado a la hora de pensar que el arbitraje de Darío Herrera en el Independiente-Boca de este domingo fue malo, que perjudicó en jugadas puntuales al Rojo, y que le perdonó la roja a Emanuel Gigliotti. Pero con el gol anulado y un penal no visto, quedó la sensación que el elenco local fue más dañado.
Era muy fácil apuntarle a Herrera, obvio, estaba servido. Sin embargo, Pablo Moyano, eligió dirigir sus dardos filosos más arriba. A Balcarce 50 y a Viamonte, a Mauricio Macri y a Claudio Tapia, este último, familiar directo de él: “Da bronca por todo el esfuerzo que hacemos y después viene un referí como éste y te roba un partido. Es un ataque de Macri a través de Tapia, en contra de Moyano y los clubes que conducimos”, puntualizó el vice del club, en declaraciones a “Rojos de Pasión”.
Ahora, ¿Por qué Moyano dice esto? Los dardos a Macri están claros. Los Moyano, en especial Pablo, se sienten perseguidos. El vice del Rojo está involucrado en una causa que investiga una Asociación ilícita en el club, en la que hay una numerosa cantidad de llamados y pruebas que dejan muy comprometido al vice de Independiente. Por la misma, el fiscal Sebastián Scalera, pidió la prisión preventiva para él. Algo que denegó el Juez de Lomas de Zamora, Luis Carzoglio. El magistrado ahora quedó en medio de un Jury y eso podría generar novedades en breve en la causa, incluso, Carzoglio podría perder el control de la Causa.
La hipótesis que manejan los Moyano es que el Presidente de la Nación busca dañar al Clan Moyano porque conducen uno de los gremios que es abiertamente opositor al Gobierno. La conspiración que creen que se teje en la Rosada llega tan lejos que no dudan y creen que perjudicar deportivamente a Independiente es parte del plan. Suena algo descabellado.
Por otro lado, también lepegó a su cuñado, Chiqui Tapia, quien está casado con su hermana Paola. ¿Por qué le apunta directo a un familiar? Esto se remonta a una década atrás, cuando Hugo Moyano eligió un heredero sindical dentro de su gremio. Tapia reunía simpatías dentro de Camioneros para quedarse con el rol de "futuro sucesor", lo que despertó celos en Pablo. Sin embargo, Hugo ungió, a dedo, a su hijo para evitar un colapso familiar.
Los celos persistieron con los años y llegaron a tal punto que pese a que su padre estaba de acuerdo y era uno de los principales impulsores, Pablo nunca quiso la llegada de Tapia al sillón de Viamonte. Hay una realidad y es que Pablo Moyano no cuenta ni con el carisma de su padre ni con la de su yerno. Es más, barras arrepentidos de Independiente lo apodaron “el salvaje”, porque aseguran que todo lo consigue por la vía de la fuerza fruta y los malos modos o por los "dedazos" de su padre.
Así las cosas, el vice termina enlodando al club, involucrándolo en rencillas personales maquilladas de quejas arbitrales. En la CD de Independiente cada vez hay más descontento con Pablo. Casi nadie habla bien del vice. No ocurre lo mismo con Hugo. Entre los socios también empeizan a cansarse y ven que la interna familiar, las causas judiciales y la rosca de la política nacional les son ajenas. ¿Se animará Superliga o el tribunal de AFA a advertir las declaraciones de Moyano tal como hicieron con los jugadores de Boca o su DT cuando criticaron duramente los arbitrajes?