La causa que Gonzalo Verón entabló contra el Club Atlético Independiente avanza y sigue trayéndole dolores de cabeza a la dirigencia ‘roja’. El Tribunal de Trabajo N°2 de Avellaneda dio a conocer un fallo en el que se decreta el “embargo preventivo sobre lo que la institución perciba en concepto de transferencia, venta, o cesión de futbolistas” hasta completar la suma reclamada por el jugador de anterior paso por el Rey de Copas. 

Asimismo establece que deberán “abstenerse de autorizar cesión o transferencia o contratos de servicios de futbolista profesional”, hasta que el exfutbolista ‘rojo’ tenga acreditada su deuda.

Según pudo averiguar Doble Amarilla, los abogados de la institución de Avellaneda se movieron rápido (el fin de semana estaban al tanto de las novedades que llegarían) y están trabajando sobre un amparo para que las medidas no afecten el mercado de pases. La argumentación radica en que si no puede vender, no puede pagar. 

De lograr en la justicia, dilatar la resolución del Tribunal, ganaría tiempo y podría seguir armando su plantel de cara al año 2023. Más allá de ello, las incorporaciones efectuadas al día antes del fallo sí podrán ser utilizados por el club y la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) ya fue notificada por el caso.

Cabe recordar que Gonzalo Verón llegó a Independiente a mediados de 2018 y fue parte del equipo campeón de la Suruga Bank de ese mismo año. Jugó 14 partidos y marcó un solo gol en el proceso, pero es recordado más por la faceta legal ya que constantemente se fueron conociendo sus reclamos salariales.  

Los dirigentes del Rey de Copas, bajo la gestión de Hugo Moyano, jamás oyeron los reclamos y optaron que el futbolista quede en libertad de acción.Pero Verón no se quedó quieto ni un segundo y rápidamente inició acciones legales contra Independiente a principios de 2020.

El ya exfutbolista de la institución de Avellaneda se consideró despedido y ningún dirigente de la entidad se presentó a las mediaciones que fueron citados. La causa fue avanzando, hasta que en abril de 2022 la Justicia le embargó los derechos audiovisuales internacionales y de publicidad que otorga la AFA al club.

La cifra que debe abonarle es de 4.8 millones de dólares: cuatro millones en carácter de lo que se le adeuda al jugador y 800.000 de intereses.