La histeria se adueñó de Avellaneda
Noche de locos en el Libertadores de América. Beccacece pateó un bolso, le gritó el tercero a la platea y se fue rapidito al vestuario. El equipo pasó de ganar cómodo a empatarse, casi que solo, y la gente se lo hizo saber. Volvió Pablo Pérez y fue el eje de un equipo que anda nervioso y no termina de asentarse.
(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) Parecía ser una noche de reconciliación y amor. El "Rojo" ganaba bien 2-0, con los goles de Cecilio Domínguez (gran escalada y centro atrás del resistido Pablo Pérez) y Sánchez Miño, aprovechando una macana importante del "1" de la T.
Con el juego en 2-0, Beccacece decidió sacar a Pablo Pérez, que había empezado la tarde siendo silbado y se fue aplaudido. Todo a pedir del "Rojo" y del alocado DT, que empezaba a respirar con una victoria importante contra un equipo que podía ser líder del torneo en caso de ganar.
Sin embargo, sin PP8, el elenco de Avellaneda perdió su termómetro y empezó a regalarle pelota y campo a los cordobeses. Nahuel Tenaglia, de cabeza, descontó a los '34 y empezó el nerviosismo que encontró un corolario máximo a los 41', cuando Campaña falló en un centro cruzado, Cecilio no llegó y Leo Godoy empató el juego.
Desde ahí, todo fue insultos, cánticos e histeria. En ese contexto, absolutamente desfavorable, el elenco de Avellaneda encontró el tercero con una cabezazo perfecto de Nicolás Figal. El "4" lo gritó enajenado y, el DT, se lo gritó a los plateístas. Una auténtica locura en medio de una victoria importantísima del "Diablo".
Con este resultado, el "Rojo", suma 13 puntos, igualó la línea de la Academia y se metió, por diferencia de gol, en el último lugar que clasifica a la Copa Sudamericana 2020.
Al finalizar el partido, Beccacece negó haberle gritado el gol a la platea del Rojo: "El primer gol lo grité con la familia que estaba en el palco atrás del arco, el segundo con la gente atrás del banco, el tercero no lo grité y después nos desahogamos en el final con lo que creíamos que era justicia".
Más allá de la locura, Beccacece hizo una lectura particular el clima en el estadio: "De a poquito vamos a ir ganando el cariño y el afecto si tenemos actuaciones como esta. Yo estoy a favor de lo que han expresado, de la autocrítica, cuando el equipo no juega bien lo digo, lo expreso, me hago cargo. En ese sentido siempre somos muy genuinos y muy transparentes", concluyó.