Miguel Ángel Russo llegó para hacerse cargo de Boca en medio de la Superliga 2019/20 y luego de una eliminación de Boca ante River en semis de la Copa Libertadores 2019, que le selló el pasaporte de salida a Gustavo Alfaro. El inicio del ciclo fue inmejorable: seis victorias seguidas y campeón en la última vuelta, ante un River que se quedó sin nafta. Russo fue el primer elegido de la nueva conducción de Boca luego de ganar las elecciones. Este martes, un año y medio después, el mismo Consejo de Fútbol resuelve el final del ciclo. ¿El saldo? Dos títulos más para el club, y dos dolorosas eliminaciones de Copa Libertadores, una por las formas, la otra por lo injusto.

Boca no supo sostener aquella primera imagen de la Superliga y la Copa Maradona y ni siquiera eliminar a River de la Copa Argentina le valió para mejorar su imagen en la actualidad. La serie de 8vos de final de la Copa Libertadores 2021, ante Atlético Mineiro, dejó un sabor "mentiroso". Quedó la sensación que Boca mereció pasar, a caballito de los horrores del VAR, pero después, Boca no sostuvo, nunca en este semestre, esa manera de jugar. Tal es así que la última victoria del club hay que buscarla en el pasado 26 de mayo, cuando el Xeneize venció 3-0 a The Strongest, en la última jornada de la fase de grupos de la Libertadores 2021. De los últimos 16 partidos, esa fue la única victoria de Boca. Muy poco. Es más, el club igualó su peor racha histórica, ya que lleva 10 partidos sin ganar.

Después de aquel primer título, que vino seguido de un 4-1 a Godoy Cruz en Mendoza, en la primera fecha de la Copa de la Superliga, que el covid no dejó que se complete, Boca afrontó el parate con una racha casi tan buena y duradera como la que hoy tiene, pero en la adversidad. Boca sumó un invicto total de 16 partidos, con ¡13 triunfos!, hasta que en la tercera fecha de la Copa Liga Profesional, como local ante Talleres, sufrió  la primera derrota.

Sin dudas, la derrota ante Santos, en la Semis de la Copa Libertadores 2020, fue el primer gran escollo para el ciclo de Miguel Ángel Russo. Ya sin "Pol" Fernández, el equipo lució muy desdibujado y cayó 3-0 en su visita a Brasil. Fue la primera vez que se habló de "fin de ciclo" para el DT. Es que el Xeneize venía a los tumbos, había eliminado a Inter por penales en los 8vos, tras ganar en Brasil y caer en La Bombonera, había sacado a Racing, tras perder la ida en Avellaneda y ganándole en La Boca. 

Luego de esa eliminación, llegó el segundo título, la Copa Diego Maradona. Empató 1-1 ante Banfield (le igualaron en el último minuto, cuando lo tenía ganado) y en los penales pudo más que el 'Taladro'. El "plus" de ese torneo, es que logró empatarle a River en La Bombonera, tras ir perdiendo 2-1 a poco del final y con ese empate, impidió que los de Gallardo se metan en la final. Fue otro momento, el post Banfield, dónde también se hablaba de fin de ciclo.

Ya en inicio de la fase de grupos de la Copa Libertadores 2021, Boca arrancó ganando en La Paz y ante Santos, en La Bombonera. Pero recién pudo clasificarse en la última jornada, el 26 de mayo, en la última victoria del Xeneize en el año. Luego, llegó al serie con el Mineiro, 180' en los que no se sacaron ventajas (al menos, convalidadas). El escándalo final, tras esa serie, derivó en un aislamiento obligatorio que puso a Sebastián Battaglia por primera vez al frente del equipo.  

El actual torneo de la Liga empezó de la peor manera para Boca: arrancó empatando ante Unión, en Santa Fe, empate ante Banfield y derrota ante San Lorenzo, empate en Córdoba, con el regreso de Russo y los titulares, empate ante Argentinos y caída ante Estudiantes: 4 puntos sobre 18 y lejos de la Copa Libertadores 2022. El único "aliciente" de este tramo del año fue una nueva eliminación a River, por penales, en la Copa Argentina.

En total, Russo dirigió 64 encuentros, de los cuales ganó 29, empató 23 (incluida la final ante Banfield en la Copa Maradona, el juego ante River en los cuartos de final de la Copa de la Liga Profesional y la Copa Argentina, ambos ganados por penales , mientras que perdió de la misma forma ante Racing en la semifinal de ese certamen y en octavos de final de la Copa Libertadores 2021 contra Atlético Mineiro) y cayó en los restantes 12 (contra Inter fue 0-1 en la revancha de los octavos de la Libertadores 2020 y también lo derrotó desde los 12 pasos). Su efectividad fue del 57,3% de los puntos. En números, no es un mal ciclo, para nada.

Pero desde enero hasta esta parte, el equipo estuvo en un tobogán en caída. El rendimiento jamás mejoró y no supo como afrontar las salidas de Carlos Tevez (decisión personal) y de Sebastián Villa (situación personal). Los refuerzos no funcionaron como se esperaba y hoy Boca tiene menos plantel que antes, y juega aún peor. Eso sí, en el aspecto defensivo, el ciclo tiene números sorprendentes: Boca convirtió 87 goles y tan solo recibió 39.

En el apartado Superclásicos, Russo logró parar la hemorragia contra River. Lo enfrentó cuatro veces y fueron 4 empates. Eso sí, en los dos clásicos que pusieron en juego "eliminación directa", el elenco de Russo pateó mejor los penales y eliminó a River de la Copa de la Liga 2021 y de la Copa Argentina 2020/21. Terminó siendo poco para poder sostenerse en el cargo.