Rapallini y un superclásico donde no logró pasar desapercibido
El árbitro fue protagonista en varias situaciones del encuentro de este sábado entre Boca y River en la Bombonera.
(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) Fernando Rapallini fue el árbitro designado para el Superclásico entre Boca y River en la Bombonera. El juez tuvo algunas intervenciones flojas en el desarrollo del juego.
La más clara y más polémica fue la amarilla a Jorman Campuzano en el primer tiempo. El mediocampista de Boca le pegó un codazo a Jorge Carrascal que para el referí fue amarilla, aunque debió ver la roja.
Previamente, los defensores de River habían pedido offside de Wanchope en el primer gol de Boca, pero el delantero estaba habilitado cuando convirtió frente al arco de Armani.
En el segundo tiempo, el colombiano de Boca volvió a cometer una falta similar sobre Matías Suárez, nuevamente vio la amarilla y salió expulsado en los primeros minutos del complemento.
Por otro lado, la terna arbitral tampoco sentenció offside claro en una jugada que Armani le tapó a Wanchope, en el complemento. La misma quedó marcada por los reclamos de Mauro Zárate, que quedaba con chances más claras de definir que Ábila.
En el último tramo del partido, cuando fue expulsado Enzo Pérez, hubo cruce entre Sebastián Villa y Rafael Santos Borré; en tanto, Tévez, a destiempo y de manera violenta, cruzó a Nacho Fernández sobre el tiempo de descuento, situación que no fue advertida por el árbitro.