Dani Alves pagó la fianza y recuperó su libertad tras 14 meses detenido
El ex futbolista abandonó el complejo penitenciario Brians 2 tras abonar la suma de un millón de euros. El brasileño había sido condenado a cuatro años y medio de prisión por violar a una mujer en la ciudad condal.
Dani Alves saldrá esta tarde de prisión después de pagar la fianza de un millón de euros que necesitaba.
Además, el futbolista cumplió las demás órdenes de los tres jueces pese a su reciente condena por violación entregando sus pasaportes español y brasileño.
El ex futbolista de 40 años pasó el fin de semana todavía encerrado porque no había podido conseguir el dinero en efectivo para salir de la cárcel española.
En un principio, se esperaba que el padre de Neymar ayudara a Alves a pagar el dinero para asegurar su libertad, pero él mismo emitió un comunicado negando que entregaría dinero en efectivo después de verse bajo presión política en su país natal.
El brasileño había hecho varios intentos antes de su condena para obtener la libertad bajo fianza, pero todos fueron rechazados en parte porque corría riesgo de fuga.
Alves ahora vivirá en su casa de Llobregat mientras sus abogados pasan por el proceso de apelación. Se espera que sea liberado por primera vez en 14 meses esta tarde.
Por su parte, la abogada de la víctima, Ester García, de 23 años, calificó la liberación de Alves de "escandalosa" y la calificó de "justicia para los ricos".
El ex futbolista fue acusado de violar a la mujer en el baño de una discoteca de Barcelona el 30 de diciembre de 2022.
Alves afirmó que el encuentro sexual fue consentido e insistió en que "nunca haría daño a nadie". Fue declarado culpable de violación y sentenciado a cuatro años y medio tras las rejas en febrero.
Sin embargo, el 20 de marzo de 2024 un tribunal dictaminó que podía apelar su condena y salir de prisión mientras su equipo, encabezado por Inés Guardiola, llevaba a cabo la apelación.
Su fianza se fijó en €1 millón. Las condiciones de la fianza fijadas por el tribunal establecen que Alves debe permanecer al menos a mil metros de la casa de la víctima o de cualquier otro lugar al que vaya con frecuencia.
También tiene prohibido contactarse con ella y debió entregar sus pasaportes brasileño y español.
El tribunal temía que Alves pudiera abandonar España y viajar a Brasil para intentar evitar una pena mayor en la cárcel. Por ahora regresará a su casa cerca de Barcelona.