Dinero no bancarizado y contratos que "no prosperaron": la respuesta de Español sobre el vínculo con Caruso y Zoe

La Justicia sigue avanzando en la investigación sobre la empresa Generación Zoe, el holding que todavía lidera Leonardo Cositorto y que está señalado por llevar adelante un entramado complejo dedicado a la estafa piramidal. Ya son varias las personas detenidas e incluso el propio empresario tiene un pedido de captura internacional.

Generación Zoe nació como una empresa dedicada al "coaching ontológico", pero luego se fue expandiendo en distintos rubros. En apenas pocos meses, Cositorto, con el dinero de los estafados que ingresaron al negocio como inversores -y con la promesa de recibir rendimientos mensuales del 7,5% en dólares- abrió locales dedicados a la gastronomía, la construcción y el asesoramiento financiero, entre otros.

A su vez, sus redes de influencia también llegaron al fútbol. Aún en la actualidad, la marca Zoe aparece como sponsor central en la camiseta de Chacarita y como agregado en la de Cañuelas. Cositorto también fundó sus propios clubes, denominados Deportivo Zoe y Zoe Athletic Club de Villa María.

Pero su vínculo más aceitado y probado es con Deportivo Español. Desde este club, el empresario comenzó a tener influencia en el fútbol argentino. Como viene contando Doble Amarilla, Zoe y la institución de Parque Avellaneda celebraron convenios que, en principio, estaban dedicados a la sponsorización y al manejo del marketing del club. Pero la relación fue más allá. Una de las personas que aparecen involucradas en toda esta historia es Ricardo Caruso Lombardi, mánager del club y, según él, amigo personal de Cositorto.

Esta semana, el periodista Andrés Lerner reveló en Radio 10 varios contratos que vinculan a Caruso con Generación Zoe y una serie de negocios que comparten en común dentro de Deportivo Español. En esos vínculos se puede leer claramente que el director técnico, actualmente  en función de mánager, ofició como un nexo entre el holding empresario y Español. El contrato habla de un salario por sus servicios de $5 millones netos cada tres meses y diferentes premios por objetivos. Además, en una de las carillas, también se menciona la cesión de un 20% de los derechos económicos de los jugadores de la Primera División, mientras que a Zoe le corresponde el 40%.

Ante esto, el presidente del club, Diego Elías, aceptó tener un derecho a réplica y le contó a Doble Amarilla cuál es el vínculo que une a Deportivo Español, Generación Zoe y Caruso Lombardi. "Tenemos un contrato de sponsorización con Zoe. Es un acuerdo global, que no sólo abarca al fútbol masculino, sino al manejo de redes sociales, cartelería y otras actividades", comenzó diciendo.

El presidente de los "Gallegos" quiso dejar establecido que lo que hay entre club y empresa es un contrato de sponsor, pero no de un gerenciamiento encubierto. "Zoe tiene un contrato de sponsorización y administración compartida, no tiene ningún tipo de contrato de gerenciamiento. Ni lo tiene ni tampoco actuó el club tomando decisiones de este tipo", declaró, pese a que la empresa, en los papeles que se revelaron, tiene el manejo de varios sectores clave de la institución.

Pero uno de los puntos más controversiales es cuál es el verdadero rol de Caruso en el club y si efectivamente es uno de los involucrados en el gerenciamiento. El propio entrenador tuvo que salir a los medios de comunicación a aclarar su postura. Desde un primer momento, Caruso y su entorno se empeñaron en decir que eran mentira los contratos que revelaron Radio 10 y Doble Amarilla. Sin embargo, con el correr de las horas -y ante la evidencia irrefutable y contundente de la prueba-, tuvieron que dar una versión más edulcorada de los hechos.

Caruso Lombardi, en diálogo con Infobae, contestó: "Es un contrato laboral, sino cómo querés que cobre. No soy el DT, soy manager y no hay ningún tipo de cosa rara. Me lleva Español, me junta con ZOE y el contrato me lo hizo mi abogado. Pero a los dos días pensé: '¿Qué pasa si no cobro, cómo hago para que me den la plata?'. Ahí ellos hacen el segundo contrato que habla de que me iban a dar un 20% de algún jugador que vendan, que es medio imposible, pero bueno les dije está bien. Era para cubrirme por si no me pagaban. Pero cuando se lo llevo a mi abogado me saca cagando, me dice que no sirve porque está mal redactado y no se puede hacer ese convenio, y me preguntó por qué lo firmé. Yo le dije que fue para cubrirme por si no me pagaba. 'No', me dijo, dalo de baja, y le di de baja. Los llamé y les dije 'éste no va, va el primero, el segundo no tiene validez' y lo rompí. Eso fue todo".

Este relato tiene un hilo conductor con las declaraciones que le brindó el presidente de Español a Doble Amarilla, que reconoció que hubo una propuesta para ofrecerle a Caruso el porcentaje de algunos futbolistas. "Eso es un bosquejo de un contrato que duró menos de una semana. Era solamente para respaldar el pago de Ricardo, sobre todo por si había algún inconveniente por parte de Zoe. Quedó totalmente nulo a los tres o cuatro días. Se rompieron las copias y se dio el visto bueno al contrato que apareció donde está la carga salarial y el premio por ascenso", admitió.

"No hubo ninguna cesión, fue una idea que funcionaba como una garantía para cumplimentar el contrato si Zoe se trababa y no pagaba. Los letrados dijeron que no, ese vínculo duró 72 horas. Ese contrato no está vigente y se dio de baja, no se quedó con ningún porcentaje", agregó Diego Elías a este medio.

Según relata el presidente, la empresa Zoe, dentro del manejo de algunas áreas del club, tenía el 60% de la cartelería del estadio y de otras instalaciones. También manejaba el control de las redes sociales y del marketing. A su vez, Español acordó prestarle el estadio a Deportivo Zoe para que pudiera entrenar, al menos, tres o cuatro veces por semana. Elías le dijo a Doble Amarilla que el vínculo comenzó en marzo y que formalmente se rubricó en mayo.

Sobre la forma de recibir dinero por parte de Zoe, reveló: "Siempre nos pagaron en pesos y efectivo, nunca se hizo ningún tipo de transferencias. Cuando llegaba el momento del pago se comunicaban de la gerencia y pactaban conmigo o con el tesorero en su defecto. Nos decían por cuál sucursal había que pasar a retirar el dinero. No hubo ni cheque al día, ni CBU ni nada, todo efectivo".

Por último, un detalle no menor, Elías dijo que el club le pagó a los futbolistas siempre en pesos y en línea con los contratos que piden la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) y Futbolistas Argentinos Agremiados (FAA). Aunque también reconoció que algunos premios particulares se "abonaron" con el depósito de Zoe Cash en billeteras virtuales que les crearon a los futbolistas. "No hay cobro en otro tipo de moneda, siempre lo pactado en pesos. Quizás algún objetivo personal de algún jugador. Los premios por suma de puntos eran generalmente en pesos y algo en una billetera virtual, que era a modo publicitario", cerró.