La medallista olímpica en París 2024, Eugenia Bosco, denunció a su exentrenador Leandro Tulia por abuso sexual. La presentación la realizó luego de su participación en los Juegos Olímpicos y se sumaron tres testimonios contra el hombre. 

La deportista, de 27 años, realizó la presentación en la Justicia de Vicente Lopez contra Tulia, quien entrenó a Bosco hasta los 15 años. El caso lo investiga la UFE Género de Vicente López a cargo de Lida Osores Soler

Luego de esta presentación, tres mujeres más se acercaron a denunciar a Tulia por hechos similares

Bosco decidió denunciar a su ex entrenador luego de obtener la medalla plateada en los Juegos Olímpicos de París 2024 en Nacra 17 de Vela junto a Mateo Majdalani. En una entrevista con el Diario La Nación, reveló que habló del tema con su psicólogo y con sus padres. 

Bosco y Majdalani consiguieron la medalla de plata en Nacra 17 vela en París 2024
Bosco y Majdalani consiguieron la medalla de plata en Nacra 17 vela en París 2024

El estremecedor relato de Bosco

La deportista reveló que el episodio de abuso sexual ocurrió cuando tenía 12 años y asistía a la escuela Optimist, donde realizaba prácticas de vela. Tulia estaba a cargo de la enseñanza y vivía en el Yacht Club de Olivos. 

"Sucedió cuando era muy chica, o sea, cuando estaba navegando en Optimist. No sé cómo explicarlo, pero fue algo que pasó, que no lo controlé, tenía 11 o 12 años y lo aparté de mi vida hasta hace un par de años que lo pude ver, trabajando obviamente y con gente acompañándome", relató Bosco. "Lo pude volver a mi mente y arrancó otro proceso. Yo sabía que había algo en mí, no sabía de dónde venía, pero sabía que había algo. Y cuando esto vino empecé a entender un montón de cosas", agregó.

Eugenia Bosco, medallista olímpica en París 2024, denunció a su ex entrenador por abuso sexual

Luego, continuó: "Es una edad en la que empezás a clasificarte a campeonatos, a viajar sola, a tener un grupo donde te mezclás mucho. Yo venía de San Pedro todos los fines de semana, viajaba a veces con mi hermano, a veces sola y después éramos un grupo grande que se quedaba a dormir en el mismo lugar, todos bajo el cuidado de esta persona". 

"Yo iba todos los fines de semana y a eso le sumaba quedarme a dormir, así que eran muchas horas y mucha responsabilidad de esa persona de estar al mando de nosotros", cerró.