Ferrari exhibió la máquina con la que Froilán González hizo historia hace 70 años en Gran Bretaña
Se cumplen siete décadas del histórico primer triunfo de la escudería italiana en la competición profesional. Bajo la conducción del "Cabezón", en 1951 consiguieron imponerse en el Gran Premio de Silverstone.
En conmemoración a los 70 años de la primera gran victoria de la escudería Ferrari en Fórmula 1, el equipo exhibió la Ferrari 375, la máquina con la que el argentino José Froilán González consiguió el triunfo en el Gran Premio de Gran Bretaña, en Silverstone.
A 70 años de la hazaña del "Cabezón" González, su proeza cobra mayor dimensión porque ese día el hombre que nació en la cuna de campeones, Arrecifes, un 5 de octubre de 1922, le dio la primera alegría en la Fórmula 1 a don Enzo Ferrari.
La idea de "Pepe" en 1950 era correr en Fórmula 1, en el año del nacimiento de la categoría, y fue así que debutó con una Maserati 4 CLT en el Gran Premio de Mónaco, pero abandonó en la primera vuelta al involucrarse en un accidente con otras 10 máquinas.
A comienzos de 1951, en una carrera de Fuerza Libre en el circuito de Palermo, González logró a bordo de una Ferrari vencer a las poderosas Mercedes, una de las cuales era conducida por Fangio, y su gran día llegó cuando don Enzo Ferrari, quien había sido despedido de Alfa Romeo, se contactó con Froilán González y le ofreció correr oficialmente uno de sus autos que había dejado vacante Piero Taruffi.
La escudería Ferrari tenía como pilotos nada menos que a los italianos Alberto Ascari y Luigi Villoresi, y se sumó González para darle dura batalla a los Alfa Romeo de Giuseppe Farina y Fangio, quienes habían sido campeón y subcampeón del mundo el año anterior.
Eso poco les importó al "commendatore" Enzo Ferrari y a José Froilán González, quienes fueron forjadores de la proeza de quebrar el dominio de las Alfettas, y las derrotaron el 14 de julio de 1951 en Silverstone, que utilizó una vieja base aérea como circuito.
Para ese día, González contaba con la famosa "Ferrari 375", con un motor de 12 cilindros en V, y 4.5 litros de cilindrada con aspiración normal, mientras que las poderosas Alfa Romeo poseían un motor de 8 cilindros en línea, y 1.5 litros de cilindrada pero con compresor.
González, que había hecho la 'pole position', fue superado por la Alfetta de Fangio en el el séptimo giro, pero recuperó el liderazgo en la vuelta 39, y la clave estuvo en la estrategia en la carga de combustible para las 90 rondas pactadas.
Promediando la carrera, Fangio ingresó a reponer combustible y demoró 50 segundos contra los 30 que empleó la Ferrari de González, pero el arrecifeño no las tenía todas a favor.
En ésa época se estilaba ceder el auto a un compañero de equipo que disputara el título si el de éste abandonaba, pero don Enzo no aceptó que González le diera su máquina a Alberto Ascari, que peleaba el cetro con Fangio, y así el arrecifeño se encaminó al triunfo.
Ese primer triunfo de una Ferrari le permitió a González ser uno de los pilotos más queridos por don Enzo, y el "Cabezón", contrariamente al resto, no necesitaba anunciarse cada vez que visitaba el templo de Maranello dónde se construyen los autos del Cavallino Rampante.
Además, González ganó las las históricas 24 horas de Le Mans en 1954, bajo la lluvia, con la Ferrari que compartió con Maurice Trintignant, y fue subcampeón ese año de Fórmula 1 detrás de Fangio.
Cuando concluyó la extraordinaria actuación del "Cabezón" González en Le Mans, que lo convirtió hasta hoy en el único argentino en triunfar en esa mítica competencia de resistencia, y haber conducido 17 de las 24 horas bajo la lluvia, lo apodaron el "Toro de las Pampas".