Diego Schwartzman fue eliminado este lunes en la segunda ronda del Masters 1000 de Cincinnati, al perder ante el estadounidense Reilly Opelka por 6-3 y 7-6 (7-4) y fue muy autocrítico con su juego: "Jugué un partido horrible".

"Fue difícil el partido. Todo lo que tenía que hacer para ganar, lo hice muy mal. Jugué un partido horrible. Saqué muy mal, intenté meter más los primeros saque en el segundo set, pero el primer set se me fue rápido, hice muchos errores", dijo el 'Peque' tras la derrota.

"Encima las estadísticas de saque de él tampoco fueron tan buenas. En el segundo set tuve la chance, pero cometí muchos errores de fondo, y ahí tendría que haber sido muy superior. Jugué horrible. No sé si culpar al ritmo. Tuve un muy mal día", concluyó el tenista argentino en la rueda de prensa que ofreció a través de Zoom por la pandemia.

Schawartzman, número 13 del mundo y noveno preclasificado del torneo que se juega sobre canchas rápidas, fue superado por el fuerte sacador estadounidense Opelka, ubicado en el puesto 39 del ranking de la ATP, tras 1 hora y 40 minutos de enfrentamiento en el complejo tenístico de Flushing Meadows, Nueva York, sede excepcional del Masters de Ohio por la emergencia sanitaria a causa de la pandemia de coronavirus.

El 'Peque', nacido hace 28 años en la Ciudad de Buenos Aires, se había presentado ayer con una victoria ante el noruego Casper Ruud por 7-6 (2) y 6-3.

El argentino y el estadounidense estaban hasta hoy 1-1 en el historial personal: Schwartzman había ganado en el Masters 1000 de Canadá 2017 y Opelka se había impuesto en el Masters de Miami, el año pasado.

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El otro argentino que participa del certamen, el marplatense Horacio Zeballos se presentó ayer en dupla con el español Marcels Granollers y venció a la pareja conformada por el indio Rohan Bopanna y el canadiense Denis Shapovalov por 6-4 y 7-6 (1).

Zeballos, cuarto en el ranking mundial de dobles, y Granollers (16), jugarán mañana ante la pareja estadounidense integrada por Taylor Fritz (124) y Reilly Opelka (142).

El Masters 1000 de Cincinnati, que repartirá premios por 4,2 millones de euros, es el primer torneo del circuito ATP que se realiza durante la pandemia de coronavirus y cambió su sede a la casa del Abierto de los Estados Unidos, que comenzará el 31 de agosto, como parte de las medidas de seguridad sanitarias dispuestas por la Federación de Tenis de ese país (USTA).