El presidente de Napoli apuntó contra el rol de los representantes: "Se han convertido en una especie de impuesto"
Aurelio De Laurentiis apuntó a los agentes y las funciones que ocupan actualmente en las negociaciones de jugadores. En ésto, hizo hincapié en las altas comisiones que deben pagar por sus intervenciones. Asimismo, señaló que "no son indispensables para los jugadores".
Sin miramientos. El titular del Napoli de Italia, Aurelio De Laurentiis, se mostró el miércoles en contra del "cáncer" que en su opinión constituyen los agentes, y se preguntó por qué tienen que pagarles los clubes cuando transfieren futbolistas.
De Laurentiis también dijo en un foro en el estadio Stamford Bridge del Chelsea, que solamente ficha jugadores si tiene un control absoluto de sus derechos de imagen, lo que había impedido cerrar algunos acuerdos con posibles refuerzos.
"Ya saben, es un cáncer", dijo en referencia a los agentes el productor de cine, en un debate con el vicepresidente de West Ham United, Karren Brady. E incluso puso en duda la indispensabilidad de los representantes de jugadores: "No todos los agentes. Pero no entiendo por qué hace falta un agente".
"En Hollywood, el actor le paga él mismo (al agente). Yo no le pago al agente. En el fútbol, ¿por qué tengo que pagar? Los agentes se han convertido en una especie de impuesto y, a veces quieren que se les pague por adelantado", amplió el mandamás.
Y concluyó: "¿Por qué? Porque cuando reciben finalmente todo el dinero, van de compras por ahí y vuelven locos a sus jugadores diciéndoles: 'Estoy negociando con el West Ham, que te va a pagar dos millones más'. Y por eso los pobres chicos empiezan a jugar de manera inapropiada".
El Napoli vendió en julio al delantero argentino Gonzalo Higuain, cuyo agente es su hermano Nicolás, a la Juventus por 90 millones de euros en julio.
El papel de los agentes, que negocian con los clubes y se llevan un porcentaje de las transferencias, ha estado en el centro de la escena después de que un diario británico destapara una trama de corrupción de fichajes que llevó a la destitución del seleccionador inglés Sam Allardyce.
Los clubes de la Liga Premier inglesa gastaron casi 130 millones de libras (196 millones de dólares) en honorarios de agentes entre octubre de 2014 y septiembre de 2015, lo que supone un aumento de 15 millones de libras respecto al periodo anterior, de acuerdo con la liga.