Valencia terminó siendo otra víctima de las Sociedad Anónimas Deportivas (SAD), ya que tras la compra de Peter Lim el club no logró despegar y terminó sumergido en una crisis económica aún mayor, ya que las cuentas 23/24 y el presupuesto 24/25, dejan a la entidad al borde del colapso. Ante este panorama, el empresario lo pondrá a la venta para marcharse lo antes posible.

Los intereses a la baja, sabiendo la complicada situación social que vive Meriton en la ciudad y poniendo el foco en las nueva situación económica que se abre en el club después de desbloquear el asunto del Nou Mestalla, el camino marca la salida al final.

Según informó Marca, la cifra requerida por Lim para vender al club es de 400 millones de euros.

La realidad indica que Lim ya no invierte más en su club: ni presta, ni inyecta más vía ampliación de capital. Incluso, está ordenando la deuda para hacer más atractiva la venta. 

Sin embargo, esto no sería suficiente para cautivar a los compradores, ya que el empobrecimiento deportivo y la reducción de ingresos como consecuencia de ello, llevó al club a una situación de asfixia de tesorería que ha requerido de una refinanciación urgente en noviembre 2024.

Lim, la ayuda que terminó hundiendo al Valencia

El conjunto “Che” era un equipo europeo habitualmente. Ahora ya suma 5 temporadas consecutivas sin jugar competición internacional. Además, en noviembre de 2024, el club ya no figura ni en el Ranking UEFA en el que hay 427 cubes.

El mal presente lo llevó a perder ingresos en los Derechos de TV: cuando arribó, cobraba 83 millones y actualmente en la 24/25, sólo 54.

El Patrimonio neto era de 49,2 millones y ahora es de 18´7. Llegó a estar en 112 millones en la 15/16 tras su ampliación de capital de 100 millones. Y ha llegado a estar en la 21/22 en sólo 8.