Un fallo de la Justicia Española pone contra las cuerdas a Luis Rubiales en la causa por agresion sexual contra Jenni Hermoso
El Tribunal Supremo español ha establecido, en una sentencia, que “un beso sin el consentimiento expreso o tácito constituye un delito de agresión sexual”. Es en el marco de una causa contra un oficial policial en perjuicio de una detenida. El antecedente complica al ex mandamás de la RFEF, envuelto en un caso de similares características.
La jornada de hoy trajo un revés judicial en una causa por un caso que sienta jurisprudencia en España y tiene relación directa con una causa que sacude al planeta fútbol.
Es que el Tribunal Supremo español ha establecido, en una sentencia, que “un beso sin el consentimiento expreso o tácito constituye un delito de agresión sexual”. La interpretación de la sentencia es que un la acción así, sin consentimiento, supone 'una intromisión en la libertad sexual de la víctima con el propósito de obtener una satisfacción sexual" a costa de otro.
Ellos se desprende de condena de un año y nueve meses de cárcel impuesta a un agente policial que dio un beso en la mejilla e intentó después darlo en los labios de una detenida sin su consentimiento, en la zona de los calabozos. El Supremo confirma la sentencia previa de la Audiencia Provincial de Sevilla.
El antecedente configura una complicación mas para Luis Rubiales. El expresidente de la Real Federación Española de Fútbol, acusado por un delito similar en perjuicio de la futbolista del seleccionado ibérico, Jenni Hermoso, durante la celebración de la Copa del Mundo obtenida por “La Furia”.
Cabe recordar que a principios del mes pasado, el magistrado de la Audiencia Nacional, Francisco de Jorge, ha enviado a juicio al ex mandamás del fútbol español por los delitos de agresión sexual y coacciones por el beso no consentido que dio a la jugadora tras la final del Mundial en Sídney el pasado agosto.
Tras casi ocho meses de investigación, el juez ha acordado la apertura de juicio para Rubiales y los otros tres investigados por coaccionar a Jenni Hermoso para que justificase la actuación del expresidente de la RFEF. Ellos son: el exdirector deportivo de la selección masculina Albert Luque, al exentrenador de la femenina Jorge Vilda y el que fuera responsable de Marketing de la Federación, Rubén Rivera.
Los cuatro se sentarán en el banquillo de los acusados ante el Juzgado Central de lo Penal de la Audiencia Nacional en un juicio cuya fecha está aún por determinar, y en el que Rubiales se enfrenta a una petición de la Fiscalía de dos años y medio de cárcel, uno más que el de los otros tres procesados