El Tribunal de Justicia de Río de Janeiro destituyó a Ednaldo Rodrigues de la presidencia de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) y dictaminó la necesidad del nombramiento de un interventor para la entidad. El funcionario elegido para tal fin, en el seno del ente que rige los destinos del fútbol brasileño, es el presidente del Tribunal Superior de Justicia Deportiva (STJD), José Perdiz. 

Quien fuera el máximo dirigente estaba siendo investigado con el fin de encontrar ‘irregularidades administrativas’. La idea principal de los dirigentes que están en su contra era quitarlo de su cargo. 

Esta situación fue promovida por la oposición dentro de la CBF que recurrió a la justicia ordinaria, algo que está explícitamente prohibido por FIFA. Es por eso que el ente a cargo de Gianni Infantino sigue de cerca el asunto y se espera saber qué determinaciones tomará al respecto.

Perdiz se encontraba sesionando en el Plenario del STJD, en el centro de Río de Janeiro, cuando fue informado por mensajes de amigos ofreciéndole felicitaciones. Asumirá sus funciones en cuánto sea notificado oficialmente por la Justicia.

 En ese entonces suspendió de por vida al presidente Marco Polo del Nero por haber recibido sobornos a cambio de la venta de los derechos televisivos de la Copa América, Copa Libertadores y Copa de Brasil. Sin embargo, ningún club tuvo sanciones.