¿Qué pasa en Colombia? En plena pandemia, el Gobierno de Iván Duque enfrenta un levantamiento social anclado en la intención del Ejecutivo Nacional de enviar al Congreso la Reforma Tributaria, la cual se aferra a generar más "recaudación" con mayor impacto sobre la clase media. Este hecho generó que se encendiera la mecha y millones de colombianos salgan a la calle a protestar y se generen disturbios, represión y un estallido social enmarcado en el movimiento "El Paro Nacional".

Van cuatro días de protestas y recién hace unas horas, Duque reconoció el fracaso de su plan y pidió no enviar ahora el proyecto al Congreso, con la intención que esto pacifique al pueblo cafetero. Pero no ocurrió. Bajo el lema "el paro sigue" la gente sigue en la calle en Colombia. Cali es el epicentro de los disturbios, que tienen fuerte rebote en Bogotá, Armenia, Pereira y Manizales. Toda la zona sur del país está alzada en contra del Gobierno de Iván Duque.

Según BBC, la demandas del pueblo colombiano ahora son tres. La primera, es la salida del hombre detrás de la reforma tributaria, el Ministro de Hacienda (Economía), Alberto Carrasquilla. La segunda, es una reforma profunda de la Policía Colombiana. En estas 96 horas de protesta, la ONG colombiana "Temblores", documentó a lo largo y a lo ancho del país 940 casos de violencia policial e investiga la muerte de ocho manifestantes presuntamente atacados por policías. Esto se suma a la bronca histórica contra las fuerzas de Seguridad, y al hecho que, entre enero y el 28 de marzo se denunciaron 146 abusos y 13 muertes. Durante 2020, se contabilizaron 86 presuntos homicidios de parte de las fuerzas de Seguridad.

La tercera demanda tiene que ver con una aplicación mejor del "Proceso de Paz", tal y cómo se denomina el acuerdo del Gobierno colombiano con las FARC. Los manifestantes esperan que el actual Gobierno aplique el acuerdo que selló la administración de Juan Manuel Santos para poder dar vuelta la página y que el país pueda debatir sobre temas como educación, derechos sociales y legalización de las drogas, entre otras cosas prohibidas en el debate en Colombia durante décadas.

Claro, Colombia goza de una estabilidad macroeconómica, según refiere la BBC, pero es el segundo país más desigual de América Latina y el séptimo en el mundo, de acuerdo a las cifras del Banco Mundial.

En medio de todo este clima espeso, el país recibirá esta semana partidos de Copa Libertadores y Copa Sudamericana, que no detienen su motor. Tres equipos argentinos viajarán a tierras cafeteras en las próximas horas y jugarán encuentros en zonas especialmente caldeadas por estas horas. 

River enfrentará a Independiente Santa Fe el próximo miércoles, en el Estadio Centenario de Armenia, al estar prohibidos los partidos en Bogotá hasta el próximo 9 de mayo. Un día después, Argentinos Juniors debe jugar en Medellín y Lanús en el mismo escenario que el Millo, ante La Equidad, por Copa Sudamericana. 

"Viajamos en vuelo charter a Armenia, jugamos el partido y volvemos", le dijeron a Doble Amarilla, desde Lanús. "Supongo que nos avisarán que está todo bien allá antes de salir", deslizaron desde River que hará el mismo recorrido que el Grana: Chártel, hotel, partido, hotel, charter. Lo concreto es que ninguno de los tres partidos corre riesgo de realizarse.