Más allá que el tanto marcado por Alan Varela fue importante porque selló el pasaje de Boca Juniors a los octavos de final de la presente edición de la Copa Libertadores, además de porque es el primero oficial del juvenil, su anotación quedó marcada a fuego en la historia de la institución de la Ribera. La razón es muy sencilla, el mediocampista anotó el gol número 8.000 del club azul y oro.

“Se me pasaron muchas cosas por la cabeza. Le doy las gracias a mis compañeros y al cuerpo técnico por confiar en mí. Yo rato de sacar lo mejor de mí para ayudar al equipo. Yo sigo trabajando, estoy tranquilo y sé que mis compañeros y el cuerpo técnico confían en mí. Voy a seguir laburando para consolidarme. Una emoción enorme, una gran satisfacción. También por convertir mi primer gol en primera y ayudar al equipo a que logre el pase a los octavos que era el gran objetivo para nosotros. Estoy muy contento por eso”, sostuvo el volante que está exhibiendo un nivel notable en el conjunto de Sebastián Battaglia.

Rafael Pratts fue el autor del primer gol oficial del conjunto de la Ribera.

El club, a través de sus redes sociales, destacó la conversión 8.000 de la historia de Boca. Y es buen momento para recordar a aquellos que integran el club del millar, el selecto grupo al que ingresó Varela. Tomando en cuenta inicio de la actividad xeneize, todo comienza con una curiosidad. El primer gol de la historia oficial del conjunto de la Ribera lo anotó un nacido en Gibraltar. Hablamos de Rafael Pratts, quien el 3 de mayo de 1908 se convirtió en el primer futbolista azul y oro en marcar un gol en un encuentro por los puntos. Fue ante Belgrano Athletic en una tarde en el que marcó otro más y su equipo ganó 3-1.

Para llegar al gol 1.000, la historia de Boca debió esperar 20 años. Un 12 de Agosto de 1928, Domingo Tarasconi (máximo goleador de la década del ´20 en La Ribera), anotó el tanto con el que el Xeneize llegó a su primer millar. Fue en ocasión de un encuentro ante Atlanta que finalizó ocho a cero. El tanto histórico fue el segundo del encuentro y el primero del killer de área (marcó tres en esa jornada) desde el punto del penal, a los 40 minutos de la primera etapa (el resto los marcaron Fleita Solich, Penella en dos oportunidades, Bergamini y Cherro).

Domingo Tarasconi fue el autor del gol número 1000 de la historia Xeneize, ante Atlanta.

Once años más tarde, llegaría el gol 2.000 para los azul y oro.  En el cotejo disputado en la cancha de Ferrocarril Oeste, José Liztherman se anotó en el libro grande Boca al convertirle un tanto a Racing un 4 de junio de 1939. Y el 3.000 llegaría en 1953, cuando Juan Vairo ingresó al selecto grupo del millar al marcarle primero (de cabeza) de los seis que el Xeneize le propinó a Rosario Central (los restantes fueron del mismo goleador en tres ocasiones más, Herminio González y Fernandez Real).

Rubén Suñé también tiene lugar en este informe, al marcar el tanto número 4.000 para Boca Juniors. El “Chapa” convirtió el tercero de un 3-1 ante Gimnasia y Esgrima de Jujuy, desde los doce pasos (los anteriores habían sido de Nicolau y Cabrera). Y para el gol 5.00 quien escribió su nombre en las páginas doradas del Xeneize fue ni más ni menos que Diego Armando Maradona. En aquel inolvidable año 1981 en que el “10” arribó a La Ribera, se despachó con un hat-trick ante Instituto en la goleada 4-1 en Córdoba. El primero de ellos fue el que entró al selecto grupo del millar (el restante fue de Benitez).

Más cercano en el tiempo llegaría el gol 6.000 para los de La Boca, y lo marcaría otro Diego. En este caso Latorre. Gambetita selló el empate ante Lanús en la Bombonera, un 4 de marzo de 1997, sobre el final de un encuentro en el que caía el conjunto entonces dirigido por el Bambino Veira.

La anotación 7.000, la anterior marca antes del gol de Varela, vino de la mano de otro reconocido futbolista. Y uno que aún conserva vigencia como lo es Mauro Boselli. El actual centrodelantero de Estudiantes se anotó en la historia grande, en ocasión del empate en dos goles ante Gimnasia y Esgrima de Jujuy en La Bombonera. Allí marcó el primero de los Xeneizes (el otro fue anotado por Paletta) y que emparejó un trámite por entonces adverso ante el elenco norteño. Un tanto que lo ubicó en el grupo del millar, al que en la noche ante Deportivo Cali, arribó un tal Alan Varela.