Expulsan de San Telmo al dirigente acusado de apretar con la barra

(De la redacción de DOBLE AMARILLA) El hecho irrumpió en todos los medios. El 2 de agosto, según denunciaron los presentes, Fabián Lovato se apersonó en San Telmo junto a una decena de barras con el objetivo de suspender una asamblea clave. El motivo: ya no formaría parte de la nueva Comisión Directiva que le daba un nuevo mandato al presidente Fernando Leiro.

El hecho convulsionó al Ascenso. No hubo muchas críticas de pares, al menos en voz alta, pero sí acciones. Lovato, era hombre de San Telmo en AFA, pero el violento hecho le entornó la puerta en Viamonte. El dirigente aspiraba a un cargo que jamás llegó y probablemente nunca llegue para no generar huracanes en épocas donde parece que corren vientos de cambio en la casa madre del fútbol. 

Pese a que se lo suele ver girar por el predio de Ezeiza, Lovato no pudo volver a su amada institución. Es que tras el episodio barra, en una nueva Asamblea se decidió la expulsión de Lovato y se le retiró el carnet de socio. Así consta en el mismo sitio web del club donde cuenta los puntos tratados en ese mitin oficial (http://www.soydetelmo.com.ar/noticia.php?id=620&cat=0&div=&a=78).

La violencia fue la gota que rebalsó el vaso, pero la relación con Leiro ya no era nada buena. A Lovato lo apuntaban por un mal de varios dirigentes: olvidarse de su club y dedicarse a la rosca en AFA. En “telmo" recuerdan que para intentar seguir en la Comisión Directiva, Lovato prometió acercar un sponsor. “Fue una jugada desesperada, decía que alguien de peso en el fútbol iba a facilitar un auspicio. Para la mayoría de la Comisión nos pareció un intento desesperado de comprar su lugar más que un apoyo serio al club”, relata uno de los dirigentes fuertes de la CD.

Lo cierto es que a dos meses del lamentable hecho, Lovato, a quien apodan “LoBarra", está fuera de su club y sin su sueño de pasar tardes apoltronado en Viamonte. La violencia pasa factura.