Tras el descenso, las futbolistas de Lanús cruzaron a la dirigencia: "Para ellos el femenino era un gasto y nos abandonaron”
Eliana Ceballos apuntró contra los dirigentes del "Granate" por no acompañar a la disciplina. Sostuvo que amenazaban a las jugadoras de divisiones inferiores y reserva si se plegaban a los reclamos de las jugadoras más experimentadas
Lanús descendió a la Primera B del fútbol femenino de AFA luego de una pésima campaña en este 2023. Sin embargo, los malos resultados deportivos se deben, en parte, a las precarias condiciones en las que tuvieron que desenvolver la actividad las futbolistas durante el último año.
Eliana Ceballos, exjugadora del club y una de las referentes del equipo brindó una entrevista al medio digital “Nota al pie” en la que detalló el desinterés por parte de la dirigencia del club del sur para con la disciplina. La santafesina firmó con el club en 2022 hasta diciembre de 2023. Si bien no figuraba en el contrato, el club le aseguró un departamento para vivir junto a tres de sus compañeras, con la inclusión del desayuno y la merienda.
Sin embargo, una vez instalada en la vivienda, observó que las condiciones no eran las adecuadas. “No teníamos lavarropas ni cocina, solo un anafe”, reveló la protagonista y apuntó directamente contra el dirigente a cargo de la actividad: “Felice (Javier) nos garantizó que cuando volvieramos del receso en enero el departamento que nos había cedido el club iba a estar en las condiciones prometidas”, explicó.
Lo cierto es que al retomar los entrenamientos en pleno verano notaron que todo seguía igual. “Quería meter más gente dentro del departamento, todas amontonadas. Ahí fue cuando empezamos a poner el grito en el cielo”, recordó.
Cabe destacar que el plantel de Lanús estuvo conformado a lo largo de esta temporada por algunas jugadoras experimentadas, y varias jóvenes provenientes de la Reserva. “Como referentes siempre quisimos apartar del conflicto a las nenas, porque estaban ahí para completar y lógicamente no iban a chocar”, explicó Ceballos
Que agregó: “Cuando había algún partido de las inferiores, Felice se encargaba de ir a Alsina y les hablaba una por una para que no se juntaran con las referentes. Las amenazaba diciéndoles que si no hacían lo que les pedía, no iban a jugar más ni subir a Primera División”.
Para sentenciar: “No hace falta estar dos años en un club para conocer a las personas y las intenciones que tienen. Si hubiese querido podría haberlos llevado a juicio, pero atravesaba problemas personales y una operación familiar”.