Cristian “Kily” González puso en duda su continuidad como director técnico de Unión de Santa Fe para la temporada que viene, ya que le exigió a la Comisión Directiva del club que incorpore refuerzos de categoría en el próximo mercado de pases.

“No está asegurada mi continuidad. Estoy en contacto con el presidente [Luis Spahn] y hay que hablar muy profundo para ajustar cosas. Espero que lo entienda. No va por una cuestión de mi contrato en sí, hay que darse cuenta de que hay que mejorar el plantel, que vengan jugadores de jerarquía”, aseguró en conferencia de prensa, luego de la derrota del Tatengue contra Talleres de Córdoba.

Al mismo tiempo, comentó: "Cambiamos la mentalidad, el presidente se tiene que hacer cargo, hay que hacer un esfuerzo. Estos son golpes que hay que asimilar, ajustar más, eso a nivel de Comisión Directiva para mejorar, lo trato de transmitir. Me dicen muchos que no lo voy a lograr, pero ojalá se entienda y pueda continuar en el club".

Unión, que es el único de los 28 clubes de la Liga Profesional que no incorporó en la última ventana de pases, se encuentra en puestos de clasificación a la siguiente edición de la Copa Sudamericana.

"De no entenderlo, obvio que me voy a ir,, ajustaremos cosas que pienso son beneficiosas para el club, no solamente para el plantel profesional, sino para todas las áreas. No es un capricho, es sentido común y que todos nos pongamos la camiseta de Unión pensando en poder crecer como club y equipo. Si no están dadas las circunstancias para que no se cumpla lo que pido, seguramente no seguiré", añadió González.

Cristian González y Luis Spahn, unidos por una relación tirante

A fines de julio, el “Kily” reveló que tuvo la intención de dejar de ser el entrenador del equipo y expresó sus razones: "Yo no renuncié en el vestuario porque estaba muy caliente por el resultado del partido. Un día después hablé con el plantel por mi estado de ánimo y recibí el respaldo que me reafirmó que están a muerte conmigo y el cuerpo técnico".

Somos Boca

En aquella oportunidad, manifestó que su molestia estuvo relacionada con que el club no había logrado levantar las inhibiciones a tiempo, por lo que no pudo incorporar. "Ya me reuní con el presidente (Luis Spahn), fue una reunión positiva. Tengo fe de que se pueda solucionar lo más rápido posible así podemos incorporar jugadores, pero no hay mucho. No soy de traer por traer", había señalado. 

"El compromiso que tengo con mis jugadores me da la fortaleza para seguir. Como entrenador me siento orgulloso de los jugadores que tengo. Obvio quería que se queden todos, pero se han ido dos jugadores titulares y hoy estamos a un punto del puntero", enfatizó en dicha ocasión.