José Lemme, histórico presidente de Defensa y Justicia, con aires caudillezcos y una permanencia en el poder basada en la gestión, obras y una extensa estadía en la B Nacional para luego ascender a Primera, viene sufriendo fuera de la cancha en los últimos meses.

La novela sobre la sucesión del Patón Bauza sigue sumando capítulos. Como no podía ser de otra manera, todo es cada vez más mediático. En las últimas horas José Lemme protagonizó un blooper radial, cuando molesto por la chance bastante cierta de que su DT Sebastián Beccacece lo abandone para irse con Jorge Sampaoli a la AFA, cortó al aire una comunicación telefónica.

Aunque el mandamás de Varela no lo haya querido reconocer al aire, es casi un hecho que su entrenador abandonará el predio de Bosques y marchará al de Ezeiza. “A mi me dijo que va a pesar si agarra la Selección, y que va a cumplir el contrato con Defensa”, dijo al aire en Puro Fútbol, antes de cortar la llamada.

La casi segura salida de Beccacece se suma a la salida de Holan, que en el segundo semestre de 2016 se fue de Defensa y Justicia a pesar de que venía haciendo una buena campaña. Nunca nadie aclaró los motivos, pero en estas horas crece un interrogante en Florencio Varela: ¿por qué se van todos de al lado de Lemme? Porque según parece, el mal de ausencias que sufre el caudillo de Varela no es solo con sus entrenadores. Cuentan quienes conocen la interna, que en AFA está cada vez más solo.

Con la posible salida de su entrenador para sumarse al Cuerpo Técnico de Sampaoli en AFA, Lemme llamó a algunos dirigentes para pedir apoyo y lograr que el DT no se vaya de improviso. Y del otro lado del teléfono, no tuvo el feed back que pretendía.

Desde hace un tiempo, sus acciones van bajando en AFA. Sin lugar en el actual Comité Ejecutivo, fuentes siempre bien informadas de la calle Viamonte indican que “está pagando sus idas y vueltas en los últimos dos años”. Según parece no haber marcado una posición firme en la cuestión electoral de la AFA lo dejó mal parado entre sus pares. Y ahora llegó el momento de pagar las consecuencias.

En la interna de Defensa, pasa algo parecido. Ya no tiene la mejor relación con Hugo Tomaghello, y por más que hagan todos los esfuerzos para disimular, la grieta existe. De un lado, el apellido histórico de Tonaghello, y del otro la eterna presencia en el poder de Lemme.

Otro aspecto que marca que su imagen decae es el concepto que tienen en el referato sobre su persona. Aún muchos árbitros recuerdan cuando siendo Tesorero de la AFA pateaba puertas de vestuarios y chapeaba con su cargo cada vez que había un fallo dudoso en un partido del Halcón o cuando su equipo necesitaba un triunfo.

Así, mientras ya no tiene el cartel como para intimidar a diferentes actores del fútbol, debe solucionar sus problemas internos: si se va Beccacece sería el segundo entrenador que se marcharía de Defensa en menos de un año. Cada vez queda menos tiempo para que sus diferencias con Hugo Tomaghello salgan a la luz, a pesar de los denodados esfuerzos que hacen en Defensa y Justicia para sostener el relato de unidad, trabajo en equipo y avance institucional.