Falleció el ex jugador y entrenador alterno de la Reserva de Vélez, Hernán Manrique
Conmoción en el mundo del fútbol argentino. El ex volante de Huracán, All Boys, Belgrano, Chicago, entre otros clubes, sufrió una descompensación antes el encuentro de su equipo ante Racing esta mañana e inmediatamente fue trasladado en ambulancia, pero durante el trayecto sufrió otro paro cardíaco del cual no resistió. Si bien el partido inició, fue suspendido en el entretiempo y el club de Liniers resolvió suspender las actividades por duelo.
Lo que venía siendo una jornada habitual del Torneo Proyección de la Liga Profesional de Futbol (LPF) terminó en tragedia cuando se confirmó el triste deceso de Hernán Manrique. "Palito" era el ayudante de campo de Marcelo Bravo y habían asumido la conducción de la Reserva fortinera en febrero último.
Todo comenzó en la mañana de este viernes cuando estaba por comenzar el encuentro entre el “Fortín” y Racing, por la fecha 17 del Torneo Proyección. Con los equipos ya en los vestuarios, Manrique manifestó sentir un dolor en el pecho. El encuentro de la Reserva comenzó y dispusieron atender a “Palito” por recomendación de los propios médicos del club.
A poco de haberle realizado un electrocardiograma, el técnico alterno sufre el primer paro cardíaco y allí comenzaron los trabajos para reanimarlo. Según pudo averiguar “Doble Amarilla”, mediante el uso de un desfibrilador pudieron reanimar a Manrique, y se dispuso su traslado al Hospital Posadas.
En camino al nosocomio, volvió a entrar en paro, por lo que decidieron acortar el recorrido de la ambulancia y asistirlo en el Bicentenario de Ituzaingó, pero nada se pudo hacer para evitar el triste final.
Vélez anunció el fallecimiento de Manrique y las autoridades de la institución decidieron suspender las actividades de la entidad. Según pudo saber Doble Amarilla, las autoridades de Racing presentes para el encuentro del Torneo Proyección, una vez conocida la noticia, se pusieron a disposición de sus pares velezanos y sostuvieron que los acompañarían en la decisión que tomen.
En dialogo con el programa “Como Te Va” por D-Sports Radio, Pedro Larraquy, secretario técnico de las inferiores del club de Liniers, contó que estuvo junto a Manrique en la previa al encuentro e incrédulo todavía por la situación, explicó como fueron los hechos: "Él vino con su equipo a la mañana a preparar el partido. Estaba todo normal. En la charla previa al partido, ahí siente un dolor de pecho. Lo revisan y ahí le comentan que sería mejor que se le haga un electrocardiograma y que no ingrese al a cancha por las dudas"
“Empezó el primer tiempo y en ese momento nos contaron que tuvo un paro y que se lo tuvieron que llevar urgente al hospital. Cuando termina el primer tiempo nos cuentan que tuvo un segundo paro y que no hubo caso. Fue tan rápido que estamos todos sorprendidos”
“Palito era un gran tipo, muy trabajador y muy profesional. Estaban muy contentos con Marcelo Bravo de cómo llevaban la reserva. Es simplemente increíble. Por eso tenemos el dolor que tenemos acá". Por otra parte, Larraquy confirmó el relato al que había accedido Doble Amarilla: “Hubo que llamar a la mujer para que vaya al Posadas. Después sufrió un segundo paro y lo llevaron a Ituzaingó pero no se pudo hacer nada”. Y agregó ”estoy shockeado".
“Hoy estaban todos los cuerpos técnicos de las inferiores, estamos todos sorprendidos por lo que pasó aún. La gente se fue enterando mientras volvía del Predio de sus autos y lo sentían como algo irreal. Enterarse de la muerte de alguien con quien habían hablado normalmente minutos antes”, reflexionó el exjugador del “Fortín" y compañero de Manrique.
Luego de conocerse el hecho, AFA y la Liga Profesional enviaron sus condolencias.
Una vida tras la pelota
Antes de comenzar su etapa como entrenador, Manrique desempeñó una extensa carrera como futbolista, principalmente en la Primera B Nacional, pero también con pasos por la máxima categoría, la B Metropolitana y el torneo Argentino A.
En sus inicios logró un ascenso con All Boys (1992/1993) de la B Metro al Nacional y casi una década después, con Nueva Chicago, subió de la segunda división a la primera. Con un gol suyo, el “Torito” le ganó la primera final a Instituto de Córdoba (1-0) en Mataderos.
También ascendió a la división mayor con Belgrano de Córdoba (1997-1998) y vistió la camiseta de Unión de Santa Fe en el fútbol grande.
En el ascenso defendió los colores de Huracán y Chacarita Juniors (segunda); Atlético Tucumán y Unión de Sunchales (tercera) y su única experiencia en el exterior se produjo en Macará de Ecuador.
En toda su carrera profesional disputó 334 partidos y anotó 26 goles.