Pasó su adolescencia vistiendo las camisetas de equipos muy grandes. Jugó en River y Boca, pegó el salto a Real Madrid y lo definían como "el nuevo Messi". Sin embargo, las lesiones complicaron su carrera y terminó retirándose muy joven.

El protagonista de esta historia es Martín Acevedo. Tras un breve paso las Inferiores del "Millonario", lo fueron a buscar del "Xeneize" y no dudó en cruzar de vereda. Tiempo después, tuvo la oportunidad de probarse en el Atlético de Madrid y desde allí, pegaría el salto al Real.

Sus comienzos prometían un futuro en la elite del fútbol, codeándose con jugadores de primer nivel. Sin embargo, Acevedo tuvo mala suerte con las lesiones. Tras una serie de dolencias musculares, se rompió los ligamentos cruzados de la rodilla y ese fue el punto de quiebre en su vida. De a poco fue abandonando el fútbol hasta que se retiró definitivamente, para empezar a estudiar Derecho.

La historia de Martín Acevedo

Acevedo en las Inferiores de Boca.
Acevedo en las Inferiores de Boca.

Durante su etapa en Boca, le tocó compartir equipo con Leandro Paredes y juntos ganaron varios campeonatos. A los 12 años, le llegó la chance de emigrar al Atlético de Madrid, donde tendría un paso destacado. "Fue extraordinario, aunque obviamente tuvo sus cosas duras porque tenía 12 años cuando viajé, extrañaba a mi familia y estaba solo en la pensión. Pero creo que valió la pena. Pasé dos años y medio maravillosos", comentó en una entrevista realizada en 2022.

Lo que siguió fue la oportunidad de cruzar de vereda y recalar en el Real Madrid. Acevedo no lo podía creer. “No me importaba la plata ni nada. Hoy estoy feliz de esa experiencia porque creo que jugué en el mejor club del planeta”, recordó. En aquel momento, llegaron a compararlo con Lionel Messi. "Me pesaba mucho porque Messi es la excepción a la regla. Te ponían la mochila de quizás el mejor de todos los tiempos", admitió. 

Acevedo en Atlético de Madrid.
Acevedo en Atlético de Madrid.

Por desgracia, las lesiones empezaron a perseguirlo y le hicieron bajar mucho el nivel. “Jugaba algunos partidos bien pero me costaba agarrar continuidad. Después pasé al Zaragoza donde estuve dos años y también tuve varias lesiones", relató.

Harto de no poder sumar minutos, decidió volver al país y se sumó a Racing. Por problemas con los derechos de formación, no pudo firmar y jugó un tiempo en Reserva. Fue ahí cuando sufrió la lesión que lo alejó del fútbol. 

"Debuté en la Reserva y me rompí el ligamento cruzado de la rodilla. Esa fue la lesión más grave que tuve, pero la que más frutos me dio en cuanto a la madurez. Significó un antes y un después. Estaba con el pie enyesado y pensé que había más cosas aparte del fútbol y el horizonte se me amplió. Empecé a estudiar Derecho", explicó.