(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) Desde el cuerpo técnico de River siempre lo tuvieron claro: era la ventana, la última oportunidad, el resquicio por donde pasar cuando se está bajando la persiana, como lo definió uno de sus integrantes. Sabía que, con esta base, era la última chance de conseguir una nueva Copa Libertadores sin agrandar el margen de error por no contemplar una renovación a tiempo.

Si algo tiene este cuerpo técnico de River es que es agradecido con sus referentes. Y el vínculo, que siempre tuvo una base saludable, se reforzó luego de un mes y medio de tensiones posteriores a la eliminación contra Lanús en la Copa Libertadores 2017. Desde ese momento, la comunión fue más fuerte que nunca, fueron un todo indivisible que quedaba representado en entender que jugaba el que estaba mejor y que todos en algún momento le iban a servir al entrenador. Se tatuaron eso de que “plantel es más importante que equipo” a lo largo de una temporada.

Sin embargo, ya en la recta final de la Libertadores empezaron a recibir algunas señales. Lo que antes Armani sacaba, empezó a entrar, y más allá de que algunas veces el arquero fue el máximo responsable lo cierto es que se empezaron a notar más falencias lógicas en algunas individualidades.

Y ese es el punto de quiebre a la hora de pensar el 2019. Marcelo Gallardo no va a hacer a un lado a ninguno de sus referentes, pero tiene claro que la curva descendente está cada vez más marcada en el rendimiento de Leonardo Ponzio y de Jonatan Maidana. El defensor tiene la promesa de parte de la dirigencia de salir si recibe una oferta irresistible desde lo económico y el capitán aún no determinó qué va a ser de su carrera más allá de junio. El cuerpo técnico los quiere en el plantel por el peso específico que tienen dentro del grupo. Ahí es donde se vuelven verdaderamente imprescindibles.

Respecto al defensor, cabe recordar que empezó el año desde atrás. Siempre le costaron las pretemporadas y esta vez superó a Martínez Quarta en silencio. Sostiene el nivel cuando la demanda de minutos no es alta, pero baja ostensiblemente cuando se impone una seguidilla de partidos trascendentes. El caso de Ponzio fue más pronunciado. Su liderazgo es indiscutible desde lo anímico, pero lo mejor de River en los últimos meses se vio con Enzo Pérez como dueño del círculo central e incluso con Zuculini. Ponzio fue reemplazado por cuestiones tácticas en varios partidos, incluso los más importantes, y varias veces fue amonestado por llegar tarde a los cruces. 

Desde esta base y desde las probables ventas, más alguna confirmada como la de Gonzalo “Pity” Martínez, es que River encarará el próximo mercado de pases. Un escenario en el cual deberá determinar cuán profunda es la reestructuración para que el éxito no se convierta en una trampa. River tenía que ganar porque había invertido mucho en jugadores que encaran los últimos años de competencia de primer nivel. Lo logró, pero ahora se viene un nuevo desafío.

Gonzalo Martínez seguirá su carrera en la MLS. Marcelo Gallardo hizo el último intento luego del partido contra Gremio ¿Para convencerlo de que se quede? No, para que aguarde por una mejor oferta, por un mercado cualitativamente superior. Su ausencia es la que más le duele al cuerpo técnico porque considera que no tiene reemplazante ni en el plantel, ni en inferiores, ni en el fútbol local.

Por Exequiel Palacios está prevista una charla antes de fin de año entre Enzo Francescoli y emisarios de Real Madrid. En principio, está todo dado para que el club español invierta una cifra levemente superior a la cláusula de rescisión y deje al juvenil en River hasta junio de 2019. Es el deseo del jugador, el consejo que recibió de allegados a Lionel Scaloni y también el de su representante, Renato Corsi. River había recibido sondeos de Inter y Barcelona, pero el entorno del jugador optó por “La Casa Blanca”.

Franco Armani se encargó de desmentir puertas adentro una versión que indicaba que pediría su regreso a Colombia por cuestiones familiares. Por ahora, nada de eso sucedió. Tiene contrato y el cuerpo técnico cuenta con él. Es más, creen que luego de su paso por la selección y la pérdida de la valla invicta bajó su rendimiento por una cuestión de presión que se autogeneró, tema que habló un integrante del equipo de Marcelo Gallardo con el arquero antes del debut de River en el Mundial de Clubes.

La idea del cuerpo técnico es que Franco Petroli sea parte estable del plantel como tercer arquero, pero para ello tendrían que salir Germán Lux o Enrique Bologna y ambos son considerados como buenos relevos de Armani y, además, son respetados y queridos por el grupo. Una chance es que Petroli se incorpore a préstamo a algún equipo de la Superliga o de la B Nacional.

A Gonzalo Montiel lo siguen desde tres equipos españoles. Uno de ellos es Valencia. Ofertas formales no se presentaron. También lo tiene en carpeta el Leipzig. Por Jorge Moreira hubo sondeos del fútbol brasileño. Para el cuerpo técnico, recién en el último mes alcanzó su mejor versión física después de la lesión. Lo tienen en cuenta, pero si es necesario engrosar las arcas, no se opondrán a su salida porque creen que Camilo Mayada puede ser el reemplazante natural de Montiel y porque tienen muy en cuenta al juvenil Franco Camargo.

Precisamente a Mayada se le termina contrato dentro de 6 meses. A pesar de no ser titular, es un jugador muy importante para Gallardo. En breve se intensificarán las charlas para extender el convenio. Además, no ocupa plaza de extranjero.

Luciano Lollo volvió a lesionarse. Se lo evaluará al regreso de la pretemporada. El cuerpo técnico se esperanzó con lo que había mostrado en el último receso, pero no consiguió darle los minutos que pretendía. Si se recupera rápidamente, es candidato a emigrar, a préstamo o definitivamente. Belgrano y Tigre lo tienen en el radar. Hace seis meses estuvo a punto de ser cedido al ascenso español. Javier Pinola seguirá formando parte del plantel, al igual que Maidana, si no llega una oferta tentadora, y Lucas Martínez Quarta, quien seguramente tendrá más minutos en 2019.

Por Milton Casco hay sondeos desde México y Brasil y su representante asegura que va a llegar una oferta de Alemania. Su nivel mejoró considerablemente durante el último semestre, sobre todo en el aspecto defensivo. Al jugador le interesa emigrar siempre y cuando la oferta económica sea superior a lo que gana en River. El primer suplente de Casco es Mayada y el segundo es Nahuel Gallardo. El nivel del hijo del DT no fue bueno en las oportunidades que recibió, por lo cual no se descarta que puede emigrar a préstamo, aunque hoy por hoy lo más probable es que siga formando parte del plantel profesional.

Lo dicho: el cuerpo técnico jamás prescindirá de Leonardo Ponzio. Sí es muy probable que 2018 haya sido su último año como habitual titular en River. De una charla del entrenador y el jugador llegará el acuerdo sobre el rol que cumplirá el capitán el próximo año. Las fuentes consultadas no ven al jugador adelantando su retiro, sobre todo porque en River creen que hacer un pleno en los partidos postergados le permitiría pelear el torneo con Racing y el torneo local se volvió un objetivo muy deseado por todos, pero las mismas fuentes tampoco ven como ficha segura que extienda su carrera hasta junio de 2020, como parecía que iba a ocurrir. 

Nicolás De la Cruz es un mimado de Gallardo. River desembolsó una fortuna por parte de su pase y el uruguayo tiene tantos partidos jugados como lesiones acumuladas. Nunca rindió lo esperado y si bien es muy joven desde el cuerpo técnico sienten que está en deuda, incluso desde el compromiso. Peñarol y Nacional hicieron sondeos, pero la idea, a priori, es retenerlo o recuperar parte de la inversión. Y, en caso de cederlo, que sea a un club de la Superliga para que termine de aclimatarse al ritmo y al rigor del fútbol argentino. Un club de Buenos Aires y otro del interior del país lo tienen en carpeta. 

Por “Nacho” Fernández muchos preguntan y pocos avanzan. Para Gallardo es fundamental. No solo por lo futbolístico, también por lo anímico. Es de los jugadores que siempre está cerca del compañero que pasa un mal momento. Además, consideran que hay pocos jugadores con su versatilidad en el fútbol argentino. Su entorno aspira a una transferencia y el jugador cree que es su oportunidad de salir para hacer una diferencia económica. No se descarta que River le mejore el contrato para retenerlo. Si algo le preocupa a Gallardo es perder a muchas piezas en la misma zona. 

El representante de Juan Fernando Quintero tiene sobre la mesa una oferta formal del fútbol chino con un contrato descomunal para el jugador, pero River aún no recibió nada oficial y no lo dejará marchar salvo que los números conmuevan. Los supuestos emisarios de Tottenham, fútbol español y fútbol brasileño no se comunicaron con River. Su permanencia es prioritaria desde la visión de quienes acompañan a Gallardo. 

Lucas Pratto le dio mucho a River concentrado en pocos partidos: los más importantes. Su nivel fue irregular más allá de que siempre se le reconoció su sacrificio. Si River puede recuperar buena parte de lo invertido, no se opondrá a su salida. La situación de Rodrigo Mora es especial. En el último mes manifestó complicaciones en la zona operada y se lo evaluará durante la pretemporada. Es otro mimado del entrenador. Si está en condiciones de mantenerse en la alta competencia y River recibe una buena oferta, es probable que se vaya. 

Por Rafael Santos Borré no hubo propuesta concreta de recompra de parte de Atlético de Madrid y lo más probable es que se quede en River al menos hasta junio de 2019 o diciembre del próximo año. Se mencionó un interés de Rayados, pero su entorno lo desmintió. Ignacio Scocco tiene contrato y el cuerpo técnico lo quiere. También es cierto que Newell's está al acecho para recuperarlo. Es muy probable que, en 2020, “Nacho” vuelva a Rosario.

El objetivo principal del cuerpo técnico es encontrar un reemplazante de “Pity” Martínez. No lo ven en el fútbol local, no lo ven en las inferiores, al menos para tirarlo ya a la cancha, y saben que es probable que cuando salgan al mercado las cotizaciones espanten. En el radar hay un nombre por quien, más allá de que las partes lo desmientan, se hicieron averiguaciones. Es el paraguayo Oscar Romero, el zurdo que jugó en Racing y actualmente se desempeña en la liga de China. Su perfil seduce y en los próximos días tantearán el terreno para determinar si avanzan por él.

Para esa zona del campo fue ofrecido Luis Fernando Díaz, de Junior. No lo descartan, pero al no ser zurdo, si bien suele arrancar desde la izquierda, arranca relegado en la consideración, aunque gusta mucho su capacidad para desequilibrar en el uno contra uno. Hace un año, River tenía en el radar a Nicolás González, el ex Argentinos Jrs, hoy en la Bundesliga, pero el Stuttgart le ganó de mano.

Si emigra Maidana, River irá por un marcador central. Si también se va Lollo, no se descarta que se sumen dos. Es un lógico proceso de renovación. Jonatan terminará 2019 con 34 años y Pinola cumplirá 36 en febrero. Las principales opciones están en el exterior. Del fútbol local gustan dos: Lisandro Martínez, de Defensa y Justicia, y Juan Cruz Komar, el jugador formado en Boca que hoy defiende la camiseta de Talleres, pero corren detrás de las alternativas foráneas.

De Lisandro Martínez seducen su inteligencia, su técnica, su capacidad para adaptarse a distintas funciones y su velocidad, pero su estatura representa un interrogante. Alguien que conoce muy bien al Mundo River reflexionó: “es muy bueno, pero no sabemos dónde encajaría en la idea de juego que tenemos”. A Komar lo ven con un estilo muy similar al de Maidana. 

El lateral izquierdo no es prioridad, pero Santiago Arzamendia, de Cerro Porteño, y Fabrizio Angileri, de Godoy Cruz, son nombres en carpeta.

La situación del volante central es muy particular. Si Matías Kranevitter puede salir a préstamo del Zenit, será bienvenido, pero River no hará locuras. Enzo Pérez dio la talla como cuando se hizo cargo del mediocampo, Bruno Zuculini tuvo un muy buen rendimiento en sus últimas presentaciones, Ponzio continuará en el plantel si no adelanta su retiro y además está el pibe Santiago Sosa, que quizás se pierda la pretemporada si es citado al Sudamericano Sub 20.

Si Exequiel Palacios se marcha, River irá a buscar un reemplazante. Y también quieren sumar a un volante con gol. En ese sentido, hay dos opciones del mercado local que aparecen en el gusto por detrás de un tapado del fútbol sudamericano. Son Ángel González, de Godoy Cruz, y Rodrigo Aliendro, de Atlético Tucumán. 

Por último, si solamente emigra Mora, su lugar en el plantel será para Julián Álvarez. Si sale más de un delantero, River sumará un atacante.