La historia de Ibáñez: el jugador de futsal que le ganó a River e intentó sacarse la vida
Agustín, que juega en el club de su barrio desde los 5 años, habló en exclusiva con Doble Amarilla, remarcó su buen presente y puntualizó sobre dicho momento.
Lucas Agustín Ibáñez, ala izquierdo de Almafuerte, no solo le convirtió un golazo a River, sino que lo hizo para ganar el partido a falta de 2 minutos para que finalice. El fin de semana se jugó la fecha 6 del torneo de Primera B del Futsal de AFA, una jornada que parecía como las demás pero que significó muchísimo más.
El jugador del club de San Martín se la picó al arquero ‘millonario’ e inmediatamente se quebró en llanto desconsolado. ¿El motivo? Una dramática historia.
“Hace dos semanas, en la previa al partido con Camioneros, me tocó pasar por un duro momento familiar”, contó al término del encuentro en Red Audiovisual. Y confesó: “Lamentablemente me quise sacar la vida, me quise suicidar”.
Agustín, que juega en el club de su barrio desde los 5 años, habló sobre dicho momento en exclusiva con Doble Amarilla.
“Cuando recuperé la pelota en la mitad de la cancha y fui mano a mano con el arquero sabía que la iba a picar, pero lo que se me vino a la cabeza fue me salga bien porque si no me mataban, jaja”, mencionó.
Además, agregó: “En el momento sentí mucha emoción y felicidad. Previo al partido sabes que jugas contra un gran rival y te da ese plus de competir al máximo, después adentro de la cancha te olvidas contra quien estas jugando. Me pasó lo mismo con San Lorenzo y Boca en Supercopa. Saber que le puedo jugar de igual a igual a cualquiera con Almafuerte me pone más contento”.
Sobre la previa al partido, Ibáñez destacó: “En la previa hay de todo un poco, pero ansiedad más que nada porque querés que arranque ya el partido”. Y admitió: “Siempre está el pensamiento de cómo festejar un gol. Con dos o tres de mis compañeros decimos que vamos a hacer “el paso del mercho”, pero nunca nos animamos”.
“Yo vengo al club y me olvido de todo lo que me pasa. Almafuerte para mí es todo, juego de 8va división en el club, mis dos hermanos jugaron acá tambien desde los 5 años. Así que ya hace varios años que estamos acá con mi familia. Es el club de mi barrio por el cual dejo la vida”, mencionó sobre el apoyo y la importancia del club en un mal momento.
Por último, aclaró cuáles son sus objetivos en el corto y largo plazo: “A corto plazo me queda un objetivo por cumplir con el club que es volverlo a Primera, ojalá este año se nos de. Este año me quedé en el club porque volvió a la Primera B y tenía ganas de jugar acá, sabía que seguía la misma base, más los refuerzos, entonces creía que podría ser una oportunidad para lograr el objetivo. Y como jugador uno siempre sueña con irse a jugar a otro país, pero me plantearía jugar en un club de la A, en algunos de los mejores del país”.