Bajo la lluvia se corrió el Gran Premio de Brasil: ganó Verstappen y Franco Colapinto abandonó por primera vez
El piloto argentino salió en el puesto 16 de la grilla de partida y tuvo un buen primer sprint en el circuito de Interlagos. Sin embargo, la condición de la pista le jugó una mala pasada y el argentino se estrelló contra el muro. El espectáculo en la pista lo dio Max Verstappen, quien largó desde el fondo y se llevó todo. El neerlandés inició desde el 17.º lugar, remontó al primer puesto y ganó con récord de vuelta incluida, haciéndole el mejor homenaje a Ayrton Senna en su tierra.
El argentino Franco Colapinto, a bordo de su Williams-Mercedes disputó este domingo el Gran Premio de Brasil de la Fórmula 1, en el que largó desde la decimosexta posición. Luego de varias postergaciones y una accidentada “falsa largada”, se inició la actividad en el José Carlos Pace de San Pablo.
Colapinto terminó decimoctavo en una accidentada clasificación, pero se vio beneficiado por el retiro de su compañero de equipo, el tailandés Alexander Albon, y a que el español Carlos Sainz Jr. (Ferrari) comenzó desde el pit lane. A su vez, Max Verstappen penalizó cinco posiciones y debió largar 17.º.
El argentino tuvo una excelente largada aprovechando la cuerda de la curva 1 y mantuvo el ritmo en las dos siguientes para poder adelantarse cuatro posiciones.
Colapinto mostró un excelente ritmo en su primera carrera en condición de pista húmeda desde que está en la “Máxima”, y mostró gran parte de sus dotes conductivas. El oriundo de Pilar protagonizó además una gran maniobra para superar al múltiple campeón del mundo, el británico Lewis Hamilton en la primera curva y en la “S de Senna”.
La condición de pista le jugó una mala pasada en la vuelta 23 y el pilarense se fue ancho por lo que cayó dos lugares en el escalafón. Algo similar le pasó a Carlos Sainz luego de que Colapinto defendiera bien su posición.
En la vuelta 27, el equipo Williams lo llamó al box para cambiar neumáticos. La parada fue bastante lenta, pero a tiempo por el Virtual Safety Car al que obligó la salida de pista de Nico Hülkenberg (Haas).
Posteriormente la lluvia en San Pablo se intensificó y las condiciones de pista exigieron a pleno la muñeca y concentración de los pilotos, lo que obligó la intervención del Safety Car. El equipo británico entonces llamó a Colapinto por segunda vez para cambiar las gomas de lluvia intermedia por el compuesto para lluvia intensa.
Franco Colapinto salió decidido a recuperar en pista lo que perdió por la estrategia (y las lentas paradas en boxes) y las malas condiciones de la pista le jugaron una mala pasada. El pilarense se estrelló en el muro luego de que su auto se "espantara" al aplicar la potencia de su Williams en una zona por demás mojada.
Fue cuando salió la bandera roja. Los miles de argentinos que viajaron a Brasil vieron un buen desempeño en pista de su coterráneo, pero sufrieron la colisión de Colapinto en Interlagos. Fue, desde que está en la “Máxima”, el fin de semana en el que mayor cantidad de errores hubo. Errores tanto para el argentino como para el equipo británico. Pero sin dudas es parte del aprendizaje que requiere esta mini temporada que Colapinto tiene en la Fórmula 1.
La lucha del Campeonato de la Fórmula 1 está al “rojo vivo”
Hasta la bandera roja por el despiste de Colapinto quien brilló como nadie en Interlagos fue el actual monarca de la categoría. El neerlandés Max Verstappen, tricampeón mundial defensor y líder de la temporada, largó decimoséptimo tras la penalización que recibió por un incidente con Stroll y por no haber respetado el "Delta Time", y protagonizó una escalada apura muñeca para reanudar la actividad en la segunda posición.
El británico Lando Norris, con su McLaren, comenzó la carrera desde la “pole position”, pero fue postergado rápidamente por el Mercedes de su compatriota George Russell. Desde allí el piloto de la “flecha de plata” pudo imponer ritmo hasta que la lluvia se intensificó y el caos de las paradas de boxes cambiaron todo.
Mientras tanto atrás el campeón Verstappen dio una verdadera cátedra de manejo en una superficie por demás complicada. Protagonizó varias maniobras de superación y sacó máximo rédito de su parada en boxes para alinearse detrás de Ocon, el sorpresivo líder de la competencia al momento de la suspensión parcial.
En la vuelta 43 y luego de un safety car provocado por la salida de pista de Carlos Sainz, Verstappen fue por todo y en la mítica “S de Senna” dio cuenta de Ocon, para que estallaran las tribunas. La remontada del neerlandés lo mostró en todo su esplendor.
Una vez que tomó la punta de la carrera, Verstappen solo se dedicó a construir la diferencia con los dos Alpine que lo escoltaban. Sistemáticamente fue bajando récord de vuelta tras récord de vuelta para no solo marcar que sigue siendo el mejor de la grilla, sino para que no haya absolutamente una duda de ello.
Bajo la lluvia, con las condiciones en contra y a pura muñeca en San Pablo. Sin dudas que Max Verstappen le hizo el mejor de todos los homenajes del fin de semana a Ayrton Senna en su propia casa, a 30 años de su desaparición física.