La jornada que se llevó a cabo en Azerbaiyan fue histórica para el automovilismo argentino. En su segunda competencia en la Fórmula 1, Franco Colapinto finalizó en el octavo lugar y logró sumar sus primeras cuatro unidades en la máxima categoría del deporte motor mundial.

A bordo de su Williams, con motor Mercedes, el nacido en Pilar sorprendió desde su llegada a la categoría y en Baku escribió una nueva página para los volantes de nuestro país de manera inesperada. 

Cuando todo parecía indicar que Colapinto iba a terminar con las manos vacías por la polémica estrategia de Williams (fue el primero en ingresar a boxes y debió gestionar durante tres cuartos de la competencia los neumaticos), el argentino pudo superar Nico Hulkenberg (Haas) para llegar a zona de puntos.

Además, en los últimos giros escaló otros dos lugares por el insólito choque entre el mexicano Sergio Pérez (Red Bull) y el español Carlos Sainz Jr (Ferrari), que peleaban por el último escalón del podio de la carrera en la que se impuso Oscar Piastri. De esta manera, Franco pudo arribar octavo, sumar cuatro puntos en un fin de semana redondo para la escudería británica ya que Alexander Albon sumó seis unidades.

Carlos Alberto Reutemann en la previa a un GP
Carlos Alberto Reutemann en la previa a un GP

Después de 42 años, un piloto argentino sumó puntos en F1

Para encontrar un antecedente de un piloto de nuestro país que haya sumado unidades en la historia de la “Máxima” hay que remontarnos al año 1982.

Fue Carlos Alberto Reutemann, el último gran representante de nuestra bandera en la Fórmula 1. “Lole” fue el último argentino en subir a un podio, fue el último en ganar una carrera y también fue el último en terminar una competencia en zona de puntos de los volantes de nuestro suelo. 

El santafesino llegó segundo en el Gran Premio de Sudáfrica 1982, la carrera que inauguró aquella temporada y sumó 6 puntos para el equipo Williams. Casualidades del destino, la misma escudería a la que hoy Colapinto le redituó cuatro unidades.

Hay que hacer una salvedad al respecto y tiene que ver con las modificaciones reglamentarias. Hoy, esa misma posición le habría otorgado 18 puntos a quien fuera gobernador de su provincia además de un destacado volante. 

Reutemann, venía de quedar a un punto de ser campeón en 1981 (con la histórica polémica con Alan Jones y el título que perdió ante el Brabham de Nelson Piquet) y se retiró a la carrera siguiente de aquel GP en Sudáfrica, en Brasil. 

En la competencia en suelo “Verdeamarelho” había clasificado en el sexto lugar, la última vez que un piloto de nuestro país fue “top ten” hasta que Colapinto logró el noveno lugar en Baku.

Oscar Larrauri a bordo del EuroBrun ER188 01 de 1988
Oscar Larrauri a bordo del EuroBrun ER188 01 de 1988

La suerte de los argentinos que vinieron luego de Reutemann en F1

Después del retiro del santafesino pasaron por la Fórmula 1 con la bandera argentina otros pilotos con suerte dispar. 

Oscar Larrauri en 1988 y 1989, “Poppy”, también santafesino como Reutemann, lo hizo con la Escudería Eurobrum sin poder tener puestos de destaque en los autos integramente pintados de blanco. En ese año, se tenía que pre-clasificar para entrar entre los disponibles para clasificar.

“Poppy” un esfuerzo inmenso en las pre-clasificaciones y clasificaciones con un auto que tenía la suspensión débil. En el Gran Premio de Brasil su auto se paró en la vuelta previa por un cortocircuito. Pero en el Gran Premio de Mónaco, en donde el piloto tenía la mayor importancia por lo peligrosa que era la pista, y más si llueve, logró poner su auto en la posición 16.ª en la parrilla de salida. Al año siguiente lo intentó en cinco carreras sin poder pasar el filtro.

Fontana y su Sauber
Fontana y su Sauber

Norberto Fontana lo intentó en el año 1997. El “Gigante de Arrecifes” lo hizo al volante de un Sauber, compitiendo en cuatro fechas como reemplazante del piloto titular (Gianni Morbidelli), logrando dos novenos puestos como mejor rendimiento.

Esteban Tuero también hizo lo propio en 1998. En el momento de su debut, se convirtió en el tercer piloto más joven en debutar en la "Máxima" (con 19 años y 320 días). Minardi lo contrató para conducir un M198, aun auto totalmente inestable.

Esteban Tuero, a bordo de su Minardi
Esteban Tuero, a bordo de su Minardi

No logró sumar puntos en los 16 Grandes Premios que disputó, su mejor resultado fue un octavo lugar en San Marino. A pesar de tener su continuidad asegurada en la escudería italiana para la temporada 1999, se bajó. A pocos días de empezar la pretemporada, Tuero, por motivos personales, decidió rescindir su contrato con Minardi y eyectarse de la F1.

Gastón Mazzacane en 2000 y 2001 fue el último argentino en largar una carrera en la “Máxima”. En febrero del nuevo siglo quedó sellada su contratación por Minardi, junto al español Marc Gené. Durante ese campeonato el mejor resultado de Mazzacane fue un octavo puesto, en el Gran Premio de Europa (Nürburgring, 21 de mayo de 2000) al volante de su Minardi-Fondmetal, Mazzacane finalizó 12 de las 17 carreras que disputó ese año.

Mazzacane y su Prost de 2001
Mazzacane y su Prost de 2001

Al año siguiente y con la continuidad en Minardi asegurada, decidió cambiar de equipo y corrió al principio de la temporada con el equipo Prost Grand Prix, pero fue reemplazado por Luciano Burti luego de cuatro carreras debido a problemas con sus patrocinadores. Además, la llegada de Burti fue una maniobra de Alain Prost para satisfacer una exigencia de su nuevo socio Pedro Diniz quien había adquirido un porcentaje del paquete accionario del equipo. H

Como se dijo líneas más arriba, con el reglamento actual los tres habrían sumado puntos: Fontana fue noveno en Gran Bretaña y Alemania en 1997 y hubiera aportado cuatro puntos a su palmarés.

Tuero, por su parte, quedó octavo en San Marino 1998, habría sumado las mismas cuatro unidades que Colapinto en Baku. En tanto Mazzacane terminó décimo en Brasil, Europa e Italia en el 2000, por lo que hubiera adicionado tres unidades en la “máxima” a su foja de servicio