El líder de la barra de Nacional de Montevideo fue detenido por el frustrado asalto al Banco Macro de San Isidro
Se trata de Alan Daniel Lorenzo Rodríguez, de 34 años, quien ayer estuvo presente en el Gran Parque Central en el partido entre el Bolso y Sao Paulo por la Copa Libertadores.
La tentativa de robo al Banco Macro de la localidad bonaerense de San Isidro ha tenido un espacio importante en las portadas y minutos de aire de los diferentes medios de comunicación, a raíz de la complicada logística que los ladrones estaban llevando a cabo para concretar el atraco.
Dentro de este contexto, quedó detenido uno de los sospechosos. Hablamos de Alan Daniel Lorenzo Rodríguez (34), jefe de la barra brava de Nacional de Montevideo. De acuerdo a diferentes reportes, su aprehensión sucedió en el barrio Colón de la capital uruguaya.
Lorenzo fue identificado por las huellas digitales halladas en un galpón, sitio donde comenzaron a cavar el túnel con el fin de sustraer un botín de 30 millones de dólares de la mencionada entidad bancaria.
Presente anoche en el partido entre Nacional y Sao Paulo por la Copa Libertadores, su prontuario cuenta con un procesamiento por narcotráfico en junio de 2019, la acusación de un doble crimen (por el cual quedó exonerado por falta de pruebas) y el haber estado cuatro años privado de su libertad.
El otro detenido es Alejandro Israel Rosendo López (42), originario de la provincia de Entre Ríos, y quien además habría trasladado a los delincuentes en una embarcación desde y hacia el país vecino.
La rivalidad entre Newell's y Nacional, con Lorenzo como protagonista
En diálogo con el programa de YouTube "Una cuestión Nacional", Lorenzo aseguró en su momento: "La rivalidad más grande que tenemos afuera es con Newell’s. La gente dice que es Estudiantes por los hinchas de Peñarol que van a la cancha, pero desde el 88 quedó esa rivalidad con Newell’s. Cuando vinieron acá (2014) se pudrió. Es como ir a la guerra. La Policía hizo un destrozo en la tribuna: le pegó a padres y niños".
"A la gente de Nacional la hicieron pasar horrible en Rosario, cuando fuimos allá llegaron ómnibus sin parabrisas adelante, a la gente les pegaron con bolitas, les tiraron pichi. La pasamos mal de visitantes Cuando vinieron los de la barra dijeron que nos íbamos a tomar revancha. La barra bajó y la gente empezó a empujar de atrás, llegó un momento que no se pudo evitar la barra con la Policía, chocaron y chocaron", agregó luego.
Sobre su estadía en prisión, remarcó: "En la cárcel me desenvolví bien, no es algo que me pone contento ni mucho menos estoy orgulloso de haber estado, pero me dio otra facilidad y accedés a cosas que si no te costaría más. No entré por Nacional. Está dividida la gente de Peñarol con la de Nacional pero se convive".