Malas noticias para Robinho: el Superior Tribunal de Justicia de Brasil tomó la decisión de homologar la condena del brasileño y deberá cumplir su pena en una prisión del país.

La Fiscalía Brasileña sostuvo el ingreso a prisión durante el juicio de confirmación de la condena por violación colectiva en Italia “para evitar que el crimen que cometió quede impune”.

"No se puede permitir la impunidad de un brasileño que cometió un crimen en el exterior simplemente por el hecho de que Brasil no extradita a sus ciudadanos natos", destacó ante la Corte Especial del Tribunal Superior de Justicia, en Brasilia. Hindemburgo Chateaubriand, el representante del Ministerio Público.

A su vez, defendió la sentencia a nueve años de cárcel que le impuso la Justicia Italiana al ex delantero por violar junto a cinco personas más a una joven “embriagada” en un boliche de Milán en 2013.

“Reconocer el crímen grave de un brasileño juzgado por un país con un sistema judicial reconocido internacionalmente es la única salida para que no permanezca impune”, agregó.

Por su parte, la defensa de Robinho expuso ante el Tribunal de Brasil que el ex Real Madrid tiene que ser juzgado nuevamente en Brasil porque así lo exige la Constitución del país.

José Eduardo Alckmin, abogado del brasileño, afirmó que la ley prohíbe la extradición de sus ciudadanos y que el tratado bilateral de cooperación judicial firmado por Italia y Brasil excluye la ejecución de penas.

"Los hechos tienen que ser investigados y procesados en Brasil. Un derecho concedido por la Constitución no puede ser relativizado", remarcó. 

Sin embargo,

Este lunes Robinho rompió el silencio tras su condena a nueve años de prisión y mientras espera por el dictamen del Tribunal Superior de Justicia, órgano que está encargado de ratificar o no la pena.

"Fui condenado en Italia injustamente por algo que no ocurrió y tengo todas las pruebas que muestran eso. Si mi juicio fuera para un blanco, sería totalmente diferente, sin ninguna duda", señaló el brasileño en diálogo con Récord.

Luego, señaló: "Jugué cuatro años en Italia y me cansé de ver historias de racismo. Desgraciadamente hoy pasa. Eso ocurrió en 2013 y hoy estamos en 2024, lo que me lleva a creer que los mismos que no hacen nada contra el racismo son los mismos que me condenaron en mi juicio".

Por su parte, el exjugador de Real Madrid y Milan manifestó que espera que en Brasil pueda contar su versión. "Espero poder tener la voz que no tuve afuera. No hice nada, no hice ningún crimen", completó.