FIFA y la Organización Mundial de la Salud (OMS) lanzaron la campaña "Sospechar y proteger" para sensibilizar sobre las conmociones cerebrales. Esto se da en el marco de los "Objetivos estratégicos para el fútbol mundial: 2023-2027".

La iniciativa pretende generar consciencia sobre el hecho de que las conmociones cerebrales son traumatismos craneoencefálicos y constituyen un riesgo para los futbolistas sobre el terreno de juego. 

La campaña se basó en un proceso de consultas con expertos en salud cerebral de la Subdivisión de Medicina de la FIFA y de la OMS y busca reconocer las señales y los síntomas de las conmociones entre futbolistas, entrenadores, personal médico e hinchas. 

La campaña Sospechar y proteger se difundirá en todo el mundo a través de los canales de la FIFA, mientras que el material se pondrá a disposición de las 211 federaciones miembro para que los distribuyan en el ámbito nacional, regional y local a selecciones, clubes y ligas profesionales y comunidades de fútbol base y amateur. 

Gianni Infantino, presidente de FIFA

Los tres pilares de la campaña 

El proyecto se basa en tres puntos centrales que permitirán detectar y analizar las conmociones cerebrales. 

Informarse: los jugadores, entrenadores, médicos de equipos, padres y cuidadores deben ser conscientes de que las conmociones cerebrales son un traumatismo craneoencefálico, por lo que hay que tomárselas siempre en serio. Todo el mundo debe conocer los síntomas habituales de una conmoción cerebral para saber cuándo solicitar asistencia médica urgente.  

Sospechar: se debe examinar a cualquier persona que haya sufrido un golpe directo o indirecto en la cabeza, la cara, el cuello o el cuerpo, a fin de determinar si presenta síntomas de conmoción cerebral. Los síntomas pueden tardar hasta 72 horas en aparecer. Pueden manifestarse en forma de dolor de cabeza o sensación de "presión", náuseas o vómitos, problemas de equilibrio, mareos o inestabilidad en los pies, visión distorsionada, borrosa o doble, sensibilidad a la luz o al ruido, problemas de memoria (dificultad para recordar el incidente en el que se produjo el traumatismo y lo que ocurrió antes o después), somnolencia, confusión o falta de concentración, o problemas para dormir. 

Proteger: quien presente uno o más síntomas de una conmoción cerebral debe abandonar el terreno de juego de inmediato. Se debe consultar con un médico lo antes posible, en un plazo de 24 horas. Los síntomas de una conmoción cerebral pueden variar o evolucionar en cuestión de minutos, horas, días o incluso semanas después del incidente traumático. En función de los síntomas, es preciso recibir asistencia médica urgente. La reincorporación de los jugadores a la actividad deportiva se debe realizar siempre bajo supervisión médica. No merece la pena correr riesgos por un partido.

La opinión de Gianni Infantino y Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS 

El presidente de FIFA, Infantino, destacó el proyecto y la importancia de detectar a tiempo una conmoción cerebral. "Las conmociones cerebrales son un traumatismo craneoencefálico, y siempre hay que tomárselas en serio. Todo el mundo debería poder jugar al fútbol de manera segura en cualquier parte. Conocer los síntomas de las conmociones cerebrales, ser conscientes de los riesgos y tratarlas adecuadamente nos permitirá anteponer la seguridad de los jugadores"

Luego agregó: "Quiero mostrar mi más sincero agradecimiento a las federaciones miembro de la FIFA por su esfuerzo a la hora de sumarse a esta campaña y por seguir los consejos que nos brindan nuestros compañeros de la Organización Mundial de la Salud".

Por otro lado, el Dr. Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS, expresó: "Las conmociones cerebrales son un problema de salud pública en todas las categorías del fútbol y en muchos otros deportes, por lo que exigen un mayor grado de concienciación y acción. Por ese motivo, la OMS se enorgullece de colaborar con la FIFA en la campaña Sospechar y proteger, a fin de proteger a futbolistas de todo el planeta, ya sean jóvenes o mayores, frente a los riesgos de las conmociones cerebrales".

Dr. Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general de la OMS