Francia refrendó su medalla olímpica de oro en el voleibol masculino logrado en Tokio 2020+1 ante una ola de estridentes compatriotas que alentaron de pie de principio a fin. La Arena París Sur se transformó instantáneamente en el centro de la fiesta cuando el abatido equipo de Polonia se sentó y vio a su oponente victorioso bailar por toda la cancha.

Los franceses, segundos en el ranking mundial, ganaron 25-19, 25-20, 25-23 en la final para subirse a lo más alto del podio por segunda edición consecutiva.

Fueron liderados por la contundencia de Jean Patry, quien firmó 17 puntos, además de la eficacia de sus sacadores. Acumularon ocho aces, cuatro en el segundo set.

Earvin N’Gapeth acabó repetidamente en el suelo para salvar pelotas y mantener vivos los peloteos e, incluso, logró un punto con la cara mirando hacia otro lado de la red.

Patry capitalizó ocho de sus primeras nueve oportunidades iniciales, mientras que Barthélémy Chinenyeze comenzó de 6 de 6 en el ataque y él y N’Gapeth terminaron con ocho puntos cada uno.

Polonia llegó a la final olímpica por primera vez en 48 años, desde que capturó el oro en Montreal 1976.

“Es una locura ganarlo frente a esta gente, nuestra familia, nuestros amigos. Es maravilloso y no hay palabras”, comentó Trévor Clévenot, el rematador externo de 30 años. “Es sencillamente increíble y estamos muy felices. Es algo sensacional poder coronarse en París frente a nuestra gente”.

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