¿Cómo fueron cambiando las pelotas Mundial a Mundial?
Son el centro del juego y en cada certamen cambiaron de diseño y materiales. El repaso desde Uruguay 1930 a Qatar 2022.
La pelota es una de las protagonistas del fútbol y en cada Mundial se presenta un modelo especial con características que las distinguen torneo a torneo. A lo largo de los años, cambiaron sus diseños y los materiales con las que se han confeccionado. ¿Cómo fueron evolucionando?
En el primer certamen, disputado en Uruguay 1930, hubo una particularidad. No había balón oficial y la final, entre la 'Celeste' y Argentina, se disputó con dos distintas: los anfitriones tenían el Balón T y los 'Albicelestes' el Tiento. En el interior había una vejiga animal que se inflaba, el cuero era duro y tenía costuras en la superficie, lo que maltrataba a los jugadores que cabeceaban.
En Italia 1934 se utilizó el Federale 102, la primera pelota oficial. La diseñó una empresa privada: era de cuero con gajos rectangulares. A diferencia del Tiento, en este modelo se eliminaron las costuras. Luego, en Francia 1938 se utilizó el modelo Allen. Mantuvo los gajos rectangulares en cuero y la vejiga animal se reemplazó por una válvula.
En el Mundial de Brasil 1950 se utilizó la Super Ball Duplo T: tras 12 años de pausa por la Segunda Guerra Mundial, el balón fue reemplazado por uno más esférico y liviano, gracias al tipo de cuero utilizado.
Cuatro años después, en Suiza 1954, la pelota fue la Swiss World Champion, que tenía gajos de cuero en forma de T, tenía costuras internas y era de color naranja.
Luego, en Suecia 1958 se utilizó la Top Star en dos colores: cuero marrón y amarillo y cuero blanco. En el Mundial de Chile 1962, el modelo se llamó Mr. Crack y fue la primera pelota con forma regular esférica.
En Inglaterra 1966, el balón elegido llevó de nombre Slazenger Challenge. Era de cuero, tenía 25 paneles con gajos rectangulares y fue fabricada por una marca que hace pelotas de tenis para Wimbledon. En la final se utilizó una roja.
En el Mundial de México 1970 apareció la versión de la pelota clásica de fútbol. Llevó de nombre Telstar, tenía 32 gajos poligonales cocidos a mano y blancos y negros. Por otro lado, en Alemania 1974 se presentó la Telstar Durlast, similar a la anterior, pero con letras doradas y no negras.
Argentina 1976 tuvo a la Tango Durlast como pelota insignia; era similar a la del '74, pero ofrecía mayor impermeabilización que el anterior. España 1982 se jugó con la Tango España y combinó cuero con poliuretano para que no aumente mucho de peso en caso de lluvias.
La Azteca fue la pelota de México 1986, la primera de microfibra sintética, con lo que se logró un salto tecnológico. Cuatro años más tarde, en Italia 1990 se utilizó el balón llamado Etrusco Único: tenía una capa de espuma negra de poliuretano para que sea más veloz. En tanto, en Estados Unidos 1994 llevó de nombre Questra. Se le agregaron mallas de estabilidad y fibras trenzadas. La Tricolore de Francia 1998 tenía una capa de espuma sintética y microburbujas de gas lo que la volvió más durable y resistente.
Por otro lado, en el Mundial de Corea-Japón de 2002 se presentó Fevernova, con tres capas tejidas y una capa fina de goma espuma sintética. En tanto, en Alemania 2006 se utilizó la +Teamgeist, en la que se eliminaron los gajos, tuvo paneles sellados y no cocidos. Además, fue el primer balón mundialista personalizado: llevaba el nombre de las selecciones que jugaban cada partido, fecha, hora y nombre del estadio.
En Sudáfrica 2010 se utilizó la recordada Jabulani, que tuvo grandes críticas por parte de los futbolistas por ser resbaladiza. La catalogaron como pelota de playa porque se movía mucho y no se podía controlar con facilidad.
En Brasil 2014 la pelota fue la Brazuca. Tenía características especiales tras lo ocurrido en el Mundial anterior y fue probada por más de 600 jugadres y por 30 equipos en tres continentes.
La Telstar 18 fue la pelota de la Copa del Mundo de Rusia 2018. Tenía un diseño de píxeles blanco y negro y un chip de transmisión de datos de proximidad. El balón tenía una superficie termoadherente, sin costuras y gracias a sus características ofrecía un mayor control.
Este año se utilizará la Al Rihla, pelota que se desplaza por el aire más ráoido que ningún otro esférico en la historia del torneo, según describió FIFA.