El río Sena, donde se realizó la ceremonia inaugural de París 2024, se llevó adelante con éxito. Sin embargo, ahora no se encuentra en las mejores condiciones y se suspendió el triatlón masculino, actividad que incluye el nado. “La prioridad es la salud de los atletas”, afirmaron desde el Comité Organizador de los Juegos Olímpicos. Un escándalo que modifica los planes establecidos.

“Los análisis realizados hoy en el Sena revelaron que la calidad del agua no ofrecía garantías suficientes para permitir la celebración del evento”, informaron las autoridades a cargo del evento a las 3.30 hs. de París, a cuatro horas de desarrollarse el inicio de triatlón de varones.

De este encuentro participaron representantes de la organización de París 2024, de la federación de triatlón y sus delegados técnicos y médicos, el Comité Olímpico Internacional, además de actores de Météo France -servicio de meteorología-, de la ciudad de París y la prefectura de la región Île-de-France.
 

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A esta altura la preocupación se da porque se analiza la posibilidad de eliminar el nado, por lo que se pasaría de un triatlón a un duatlón.

“Lamentablemente, fenómenos meteorológicos ajenos a nuestro control, como la lluvia que cayó sobre París los días 26 y 27 de julio, pueden alterar la calidad del agua y obligarnos a posponer la prueba por razones sanitarias. A pesar de la mejora de la calidad del agua en las últimas horas, los valores en algunos puntos del recorrido de natación siguen estando por encima de los límites aceptables, detallaron desde la federación del deporte tras suspenderse la actividad diaria.

La inversión que se hizo en el Sena pudo haber sido en vano

En total se invirtieron casi 1.400 millones de euros para “purificar” el agua. Entre las variadas obras que se realizaron está la finalización de la cisterna de almacenamiento de agua de lluvia de Austerlitz con una capacidad de 50,000 metros cúbicos.

Además, con el objetivo de reducir la contaminación, las embarcaciones y casas flotantes que transitaban estuvieron obligadas a conectarse a la red de desagües y saneamiento.

En este lugar la alcaldesa de ParísAnne Hidalgo, se bañó frente a las cámaras y deslizó: “El agua está muy bien. Un poco fría, pero no está mal”. Tras esto, comenzó a nadar.

Todo indica que el agua no está tan bien como se había mencionado, generando un gran problema para el normal desarrollo de la disciplina.
 

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