Este miércoles se enfrentaron Mónaco y PSG, donde los parisinos cantaron victoria para consolidarse como los únicos líderes de la Ligue 1. Más allá del triunfo, el foco estuvo puesto en el arquero italiano Gianluigi Donnarumma, que sufrió una impactante lesión promediando el primer tiempo. 

“Gigio” salió achicar la jugada del lateral marfileño, Wilfred Singo, que de manera infortuita (polémica para varios compañeros del italiano) impactó con su pie derecho el rostro de Donnarumma que debió ser atendido, de manera rápida, dentro del campo de juego, ya que todos los tapones del defensor africano se estamparon contra la mejilla del italino, que pudo salir del campo de juego por sus propios medios. 

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El primer diagnóstico por parte del Paris Saint Germain, lanzó que Gianluigi sufrió un “traumatisco facial con múltiples herídas”. De regreso a París, el guardametas de la Selección Italiana se volverá a someter a estudios más exhaustivos para determinar, de manera fehaciente, el grado de su lesión. Mientras, según comunicó la entidad, "tendrá que permanecer inactivo durante varios días".

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Opiniones cruzadas

Después del partido, el entrenador del PSG, Luis Enrique, expresó su preocupación ante la lesión de su arquero y alertando ante la no sanción o llamado del VAR: "No pude ver el incidente claramente durante el juego. Pero después de revisar las imágenes, está claro que fue una situación desafiante. No creo que el jugador intentara hacer daño a nadie. Siempre es difícil para los árbitros en estos escenarios. Prefiero no comentar sobre las decisiones del árbitro".

Sin embargo, los compañeros de Donnarumma fueron más punzantes en su descontento respecto a la no sanción por parte del arbitraje. El capitán, Marquinhos, declaró: “No estoy seguro de si el árbitro se equivocó, pero el VAR debería haber estado involucrado. Necesitamos priorizar la seguridad de los jugadores. No sancionar una tarjeta roja en tales circunstancias se siente injusto”.