(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) Este lunes, la investigación del FIFA Gate sumó un capítulo luego de dos años sin nuevas acusaciones: fiscales federales acusan a Rusia y Qatar de haber pagado sobornos a varios dirigentes americanos a cambio de sus votos para la adjudicación de los Mundiales 2018 y 2022. Entre los sobornados, estaría el ex presidente de la AFA, Julio Grondona.

Según informó el periodista Ken Bensinger, la Fiscalía acusa a Rusia de haberle pagado la suma de U$S 5 millones a Jack Warner  (ex presidente de la CONCACAF y ex miembro del Comité Ejecutivo de FIFA) y de haberle prometido U$S 1 millón a Rafael Salguero (ex presidente de la Federación de Fútbol de Guatemala y ex miembro del Comité Ejecutivo de FIFA) para que ambos sufraguen a su favor en la elección para la Copa del Mundo 2018.

Por otra parte, también es acusado Qatar de haberle pagado sobornos a Ricardo Teixeira (ex presidente de la Confederación Brasileña de Fútbol), Nicolás Leoz (ex mandatario de la Confederación Sudamericana de Fútbol) y a un "Co-Conspirador N°1" que sería Julio Humberto Grondona.

Ken Bensinger on Twitter

“A Varios miembros del comité ejecutivo se les ofreció y recibieron sobornos vinculados a sus votos. Por ejemplo, Ricardo Teixeira, Nicolás Leoz y el Co-Conspirador 1 recibieron el ofrecimiento y pagos a cambio de sus votos a favor de Qatar, para que albergue la Copa del Mundo 2022″, marca el documento de la fiscalía.

En 2017, Teixeira, titular de la CBF entre 1989 y 2012, fue inhabilitado de por vida por FIFA luego de aceptar pagos de empresas de transmisión de TV para beneficiarlas en los procesos de adjudicación de derechos de certámenes organizados por Conmebol. Leoz, difunto en 2019 y máximo dirigente de Conmebol entre 1986 y 2013, también fue declarado culpable de aceptar sobornos de empresas televisivas.

La identidad del "Co-Conspirador N°1" no fue revelada a día de hoy, pero debido a la información que figura en el expediente se deduce que se trataría de Julio Humberto Grondona, ex presidente de la AFA y ex vicepresidente de la FIFA.

Fue el 2 de diciembre de 2010 cuando, en Zúrich, Rusia y Qatar fueron oficializadas como organizadoras de las Copas del Mundo de 2018 y 2022. Era la primera vez que entraba en vigencia el sistema de rotación de candidaturas que se oficializó en 2007, cuando se propuso que solo las dos últimas confederaciones acogedoras del Mundial no fuesen elegibles. Así, quedaron descartados África (Sudáfrica 2010) y América del Sur (Brasil 2014) para el Mundial de 2018 y nuevamente América del Sur (Brasil 2014) y Europa (Rusia 2018) de cara al 2022.

Con ese panorama, Bélgica-Países Bajos, España-Portugal, Inglaterra y Rusia se postularon para 2018 y Australia, Corea del Sur, Estados Unidos, Japón y Qatar para 2022. También aparecían Indonesia y México, pero ambos fueron descartados. Antes de que fueran elegidos Rusia y Qatar, Joseph Blatter, en aquel entonces presidente de la FIFA, había manifestado que las candidaturas de una sola nación tendrían ventaja en el proceso de elección.

Más acusaciones

Además de acusar a Rusia y Qatar de sobornar a dirigentes americanos, la Fiscalía también apuntó formalmente a dos ex ejecutivos de 21st Century Fox, que actualmente forma parte de Disney. Se trata de Hernán López y Carlos Martínez, quienes estaban a cargo de los negocios de la compañía en Sudamérica. En 2017, fueron implicados en el juicio. Este jueves, asistirán a una audiencia encabezada por la jueza Federal de Brookyln Pamela Chen junto a la compañía argentina Full Play, todos acusados de conspiración, fraude, sobornos y lavado de dinero. En la incriminación, también figura Gerard Romy, ex Co-CEO de la empresa española de medios Imagina.