En el fútbol español todo lo relacionado a la transmisión televisiva es de vital importancia para vender el producto de La Liga. Por eso, entre otras cosas, hay multas estipuladas para los clubes que no llenen el estadio al 70% y para evitar mostrarle al mundo un estadio semivacío se intenta llenar siempre la grada que está de frente a la cámara principal.

Otra de las cosas que jamás se escucharon por estas latitudes es que por exigencias de la televisación un equipo haya tenido que estrenar un nuevo modelo de camiseta. Esto le sucede a Osasuna, que juega este miércoles contra el Barcelona en el Camp Nou. Como los colores del club visitante son similares a los del Barça en ambas camisetas, las autoridades no quieren que a la vista el Osasuna tenga colores que "le pertenecen" al equipo catalán y por eso le impuso una equipación alternativa con otro color.

Lo sorprendente es que para el partido entre ambos equipos que se jugó en cancha del Osasuna no hubo ningún pedido especial para el local, ni tampoco cuando éste se enfrentó al Eibar, que también tiene los colores azul y rojo en su uniforme. La nueva camiseta del Osasuna es toda naranja con vivos blancos, inconfundible.