La candidatura de España y Portugal para ser sede del Mundial de 2030 sumó un nuevo tercer integrante con Marruecos luego de la baja de Ucrania, según lo anunció el propio país africano durante la reunión del Consejo de la FIFA en la capital de Ruanda: Kigali.

El propio Rey Mohamed VI de Marruecos realizó el anuncio a través de un discurso leído durante la reunión del Consejo FIFA por Chakib Benmoussa, ministro de Educación y Deportes de aquel país africano, y que se produce apenas una semana después de la baja de Ucrania del proyecto 2030 que hasta hoy era íntegramente europeo.

Mohammed VI destacó en su mensaje que “esta candidatura conjunta, que no tiene precedentes en la historia del fútbol, unirá a África y Europa, el norte y el sur del Mediterráneo y los mundos africano, árabe y euromediterráneo”, poniendo fin a negociaciones que se habían iniciado durante el Mundial de Qatar y que se habían intensificado en las últimas dos semanas.

La adhesión de Ucrania a la candidatura ibérica. en solidaridad con este país por la agresión rusa, se había anunciado en octubre pasado y quedó de lado tras la suspensión de Andriy Pavelko como presidente de la Asociación Ucraniana de Fútbol. Si bien la voluntad de la Federación Española de Fútbol es que Ucrania vuelva a sumarse al proyecto una vez se haya aclarado la situación del dirigente, a esta altura parece una utopía.

Este lunes un tribunal de Kiev anunció la suspensión de su carga por dos meses más de Pavelko por facturar con sobrecoste la construcción de campos de hierba artificial ejecutada con dinero procedente de subvenciones.

La Justicia ucraniana ya dictó una suspensión de un mes contra Pavelko el pasado 17 de febrero, pero la decisión no fue aplicada al ser recurrirla por éste.

Pavelko dice ser víctima de una conspiración, ha dejado claro que no dimitirá y apela al principio de no interferencia de los Gobiernos y la justicia en las federaciones de fútbol, reconocido en los estatutos de UEFA y FIFA, para defender su posición.

El hecho de FIFA y UEFA contemplen la exclusión de cualquier candidatura de los países que no respeten la inmunidad de sus federaciones ha llevado a España y Portugal a dejar en suspenso la  adhesión de Ucrania a la candidatura conjunta para albergar el Mundial 2030 ante el temor de que el escándalo afecte a sus opciones de ser elegidas.

Además de España, Portugal y Marruecos, las otras dos candidaturas a ser sede del Mundial 2030 son las integradas por un lado por Argentina, Paraguay, Uruguay y Chile y, por otro, por Arabia Saudita, Grecia y Egipto. La FIFA tomará una decisión en el Congreso que se llevará a cabo a finales de 2024.