Otra Champions sin Messi ni Cristiano Ronaldo: el final de una era y un legado que quedará en la historia

Nos cuesta demasiado hacernos la idea que los momentos de gloria y triunfos resonantes de Lionel Messi y Cristiano Ronaldo ya queden en el pasado. Por más cercano que sea, esas memorables tardes de Champions, esos fines de semana apartados solo para ver el clásico han quedado atrás. 

Y así como tal vez ya estén ubicados en el Panteón de los grandes, junto a Diego, Pelé o el propio Alfredo Di Stefano, lo cierto es que sin lugar a dudas son las estrellas de las que más imágenes tenemos. Sus carreras comenzaron apenas un rato después de la llegada del 'Nuevo Milenio'. Llegaron en el momento en el que las fotos se dejaron de revelar y que empezó a reinar a gran escala la época de los celulares y las cámaras digitales. Desde todos los ángulos, cada aparato tecnológico pudo captar secuencias de amagues, goles y jugadas personales. Son historia por donde se los mire. 

A pesar de haber roto todos los récords posibles año tras año durante quince temporadas, y compitiendo en el más alto nivel, la realidad de hoy los encuentra afuera de la competencia continental más importante y con el Mundial de Qatar en 2022 en el horizonte. La cita mundialista sea, probablemente, una de sus pocas motivaciones de este año.

Fue el propio Cristiano el que confesó hace algunas semanas que no falta mucho para el final de su carrera: "Mi vida fue un viaje muy bonito. Dejé huellas en todos los lugares por donde pasé. Creo que no hay ningún jugador en la historia que llegue a las cifras que llegué. Pero tener el orgullo de decir 'Por dónde pasé, dejé mi marca', me hace muy feliz. Sé que no faltan muchos años para que deje de jugar, espero que cuatro o cinco años más y espero seguir ganando cosas" sentenció CR7, en diálogo con portal DAZN. 

Leo Messi rompió un récord a pocos meses de su debut a finales del 2004. Con 17 años, 10 meses y 7 días, se convirtió en el jugador más joven en marcar un gol en la Liga para el Barcelona. 

A principios de la temporada 2005-06, la prensa ya lo señalaba como un serio aspirante a ser el jugador revelación del año,​ después de ganar el Balón de Oro y la Bota de Oro en el Mundial sub-20. En diciembre de 2005, la revista italiana Tuttosport, le otorgó el premio Golden Boy al mejor jugador joven de Europa. Messi, con 225 puntos sobre 300, superó a Wayne Rooney (127) y a Lukas Podolski.

En la temporada 2006-07, Messi se estableció en el cuadro titular y marcó 14 veces en 26 partidos. A su vez, también se convirtió en el jugador más joven en haber marcado en un Clásico. En la temporada 2007-2008, el Barcelona no ganó ningún título, aunque llegó a semifinales en la Copa del Rey y en la Liga de Campeones. Sin embargo, la temporada quedó marcada por la buena actuación del argentino, que anotó más de 10 goles en La Liga y 6 en la Liga de Campeones.

En 2008, se produjo el quiebre en la carrera de Leo. El rosarino heredó la camiseta 10 de su amigo Ronaldinho y al banco llegaba un viejo conocido de la casa: Pep Guardiola. A pesar de sus lesiones a principios de año, alcanzó el segundo puesto en el Balón de Oro y el premio al Jugador Mundial de la FIFA, en ambas ocasiones detrás justamente de Cristiano Ronaldo. El 2 de mayo, con dos goles de Messi, el Barcelona le ganó 6-2 como visitante al Real Madrid. Terminó la temporada 2008-09 con 38 goles en 51 partidos.

A los 22 años, ganó su primer Balón de Oro y el premio al Jugador Mundial de la FIFA, en ambas ocasiones por el mayor margen de votación en la historia de cada trofeo. 

Messi anotó una marca sin precedentes de 73 goles y 29 asistencias en todas las competiciones de clubes durante la temporada 2011-12, superaron los 67 de Gerd Müller en la temporada 1972-73 de la Bundesliga. En 2011, volvió a recibir el Balón de Oro, ganó el premio al Mejor Jugador en Europa. 

Para la temporada 2014/15, llegó otro viejo conocido del club, Luis Enrique como DT y se conformó con Leo, Neymar y Suárez la famosa MSN. Un hat-trick anotado ante el Sevilla el 22 de noviembre lo convirtió en el máximo goleador de todos los tiempos en La Liga ya que, tras 59 años, superó el récord de 251 goles de Telmo Zarra. Con 58 goles de Messi, el trío marcó un total de 122 goles en todas las competiciones de esa temporada, un récord en el fútbol español.

El 11 de enero de 2016, Messi ganó el Balón de Oro por quinta vez, un récord. En la 15/16, anotó 41 goles y brindó 23 asistencias, mientras que el trío de ataque del Barcelona logró un récord español de 131 goles en toda la temporada, lo que batió su propio récord de la temporada anterior.

En noviembre de 2017, Messi renovó su contrato con el Barcelona hasta la temporada 2020-21. Su cláusula de rescisión se fijó en 700 millones de euros. Terminó la 17/18 con 34 goles, recibió el Trofeo Pichichi y ganó, además, su quinta Bota de Oro. 

Para 2019, la historia no había cambiado demasiado, pero algo ya no andaba del todo bien. En noviembre, la UEFA lo incluyó en el mejor equipo del siglo XXI y el 2 de diciembre recibió su sexto Balón de Oro, un hecho sin precedentes. Hasta esa fecha, Messi tenía una incidencia en el juego mucho mayor que la de los últimos años en el Barcelona, tras haber generado hasta un 64 % de los goles del equipo. 

En 2021, Messi tuvo el segundo mejor arranque liguero de su carrera, con cuatro goles antes del 10 de enero.​ En enero, la IFFHS lo nombró máximo goleador de la historia del fútbol en un mismo club,​ y además lo incluyó en sus mejores equipos mundial y Conmebol de la década 2011-20.​ El 31 de enero, se publicó el contrato de su renovación con el Barcelona de 2017, que era, hasta esa fecha, el mayor contrato de la historia del deporte y la relación con la dirigencia del Barça que era tensa terminó de romperse. 

Tras alzarse con la anhelada Copa América aquel 10 de Julio del 2021, Messi regresó a Barcelona para renovar su vínculo, pero se terminó despidiendo por problemas en el contrato. Tras una aventura de casi 20 años, el hombre de Rosario se vio obligado a buscar otro patio trasero. Su nueva casa es el PSG, pero es evidente su poca comodidad.

Mientras atraviesa uno de sus mejores momentos con la camiseta de la Selección Argentina, 'Leo' forma parte de un combinado de estrellas que jamás se convirtió en un equipo y que se terminó evidenciando en la dolora salida de la Champions League ante Real Madrid. En cuanto a las estadísticas personales, Messi jugó 26 partidos y marcó apenas 7 goles, números muy bajos para lo que siempre acostumbró.

Cristiano, por su parte, tuvo una carrera algo más nómade. Si bien se inició defendiendo los colores de Sporting en su país no tardó en dar el salto al mítico Manchester United en el comienzo de la temporada 2003. Sin embargo, su explosión con los 'Diablos Rojos' se produciría en el temporada 2006/07, tras un mundial en el pasó casi desapercibido, marcó 20 goles en la Premier League para que el equipo de Ferguson se alzara con el trofeo. En ese año, el delantero se había convertido en uno de los mejores del mundo.

En la temporada 2007/08, el astro portugués marcó 31 goles en liga le hicieron ganar la Bota de Oro de la Premier League por primera vez, así como también la Bota de Oro de Europa, que lo hizo ser el primer extremo en conseguirlo. El 21 de mayo de aquel año, Ronaldo y compañía conquistaron la Champions League al vencer a Chelsea en una definción por penales memorable. 

En el comienzo de la 2008/09, y sobre el cierre del año ganó la Copa Mundial de Clubes a la Liga de Quito. Fue galardonado con el FIFA World Player, el Once de Oro y el Balón de Oro,​ premio que no conseguía un jugador del conjunto de Mánchester desde hacía 40 años.

El 11 de junio de 2009, el Manchester aceptó la oferta de £80 millones​ del Real Madrid, y CR7 se convertía en el traspaso más caro en la historia del fútbol hasta la fecha. El inicio fue más que promisorio, ​anotó en sus cuatro primeros partidos con el club, el primer jugador de la historia del Madrid en hacerlo. En aquel 2009, fue elegido en segundo lugar, tras Lionel Messi, para obtener el Balón de Oro. El astro portugués y el crack argentino ya eran los mejores del mundo. 

Sin embargo, pese a sus grandes actuaciones en las que llegó a anotar 33 goles en 35 partidos disputados, siendo el máximo goleador del equipo, el club no pudo ganar ningún título y fue eliminado en los octavos de final de la Liga de Campeones.

Para la temporada 2010/11, los cambios fueron profundos. Con el retiro de Raúl, Cristiano recuperó el mítico número 7 para ser una de las piezas fundamentales del nuevo DT Jose Mourinho. Sin embargo su números seguían siendo estratosféricos, terminó el año 2010 con 48 goles en total. Para el final de la temporada había anotado en La Liga 40 goles en 38 partidos superando el récord histórico de Hugo Sánchez y Telmo Zarra. 

Terminó la temporada con 53 goles en 54 partidos en toda competición, récord que compartió junto al argentino Lionel Messi.​ Además de ganar el Trofeo Pichichi, Cristiano volvió a ganar la Bota de Oro por segunda vez, convirtiéndose en el único jugador en ganar el premio jugando en dos ligas diferentes.

En la siguiente temporada, la 2011-12, Ronaldo superó sus propios récords logrados previamente al alcanzar los 60 goles en todas las competencias, su mejor marca personal. Recuperó un lugar en el podio del Balón de Oro 2011, como segundo detrás de Messi. Con sus 46 goles en el campeonato doméstico, se convirtió en el primer futbolista de la historia en anotar 40 goles o más en dos temporadas consecutivas de Liga, además de marcarle a todos los equipos a los cuales se enfrentó en Liga aquella temporada, siendo el primer jugador en la historia de la competición que lo consiguió.

En la 2012/13 se convirtió en el primer jugador no-español en 60 años en capitanear al club durante El Clásico del 30 de enero del 2013, partido que también marcó su aparición número 500 a nivel clubes. Aquel año el Madrid no alzaría ningún trofeo y Mourinho sería despedido. 

Para el comienzo de la siguiente temporada, llegaba Carlo Ancelotti. El italiano conformó con Cristiano, Karim Benzema y el flamante refuerzo Gareth Bale una delantera letal. El portugués cerró el 2013 con 69 goles en 59 apariciones, su más alto registro al final de un año, y obtuvo su segundo Balón de Oro luego de cuatro años, y el primero desde la fusión de los trofeos del Balón de Oro y el Jugador Mundial de la FIFA. En aquella temporada el conjunto merengue consiguió su décima Champions League tras alzarse con la última en el 2000. 

Durante su temporada 2014-15, Ronaldo estableció una nueva marca personal al anotar 61 goles en todas las competencias. Luego de lograr el Mundial de Clubes ante San Lorenzo, Cristiano obtuvo su segundo Balón de Oro consecutivo, entrando en la lista junto a Johan Cruyff, Michel Platini y Marco van Basten de ser tres veces ganadores del galardón. En el efímero paso de Rafa Benítez al frente del equipo merengue, CR7 se convirtió en la temporada 2015/16 en el máximo goleador histórico del Real Madrid, primero en la Liga y luego en todas las competencias.

Tras el arribo de Zinedine Zidane, Real Madrid se quedó con la 11ma Champions League y por sexto año consecutivo, el portugués acabó la temporada anotando más de 50 goles. Por sus esfuerzos en al temporada ganó el premio al Mejor Jugador de Europa por segunda vez. Para inicios del 2017, ganaría su quinto Balón de Oro, y el primer FIFA The Best.

El Cristiano Ronaldo de la Champions League 2016/17 quizás allá sido el jugador más determinante en una competencia. Marcó doce goles y se proclamaba máximo goleador y se convirtió en el primer jugador en anotar en tres finales. En esa temporada también se consagró campeón de La Liga, disputando 29 partidos y anotando 25 goles. 

El cierre de su paso por el Real Madrid se dio tras conquistar la tercera Champions League consecutiva en la temporada 2017-18 fue el máximo goleador de la edición por sexta vez consecutiva, finalizando la campaña con 15 goles. El portugués cerró su paso por la Casa Blanca tras nueve temporadas en las que se alzó con 16 trofeos tanto nacionales como continentales además obtuvo más de 20 premios individuales. Con la camiseta merengue jugó 438 partidos, marcó 450 goles y dio 120 asistencias. 

Para la temporada 2018/19, mientras los hinchas del merengue le imploraban a Florentino Pérez, la continuidad del crack, el Presidente no dio el brazo a torcer y CR7 emigró a la Juventus, en busca de convertirse en la pieza clave para que la Vecchia Signora vuelva a ganar la Champions. 

Con el Mundial de Rusia en el medio, Ronaldo se convirtió en el primer jugador desde John Charles en 1957 en anotar 10 goles en sus primeros 14 partidos de liga con su club.​ Fue segundo en los premios UEFA al Mejor Jugador en Europa y The Best por primera vez en tres años, detrás de Luka Modrić, las actuaciones de Cristiano en 2018 también lo colocaron segundo en el Balón de Oro, finalizando otra vez detrás de su excompañero del Real Madrid. 

Finalizando su primera campaña en Serie A con 21 goles y 8 asistencias, Ronaldo fue votado como el Jugador Más Valioso de la Serie A. Juventus, consiguió el Scudetto y la Supercopa de Italia pero fue eliminado en cuartos de final de la Champions. 

La temporada 2019/20 estuvo marcada por la pandemia de Covid 19. En ese adverso contexto, el portugués consiguió hacerse con su segundo scudetto y competir, con sus 31 goles, contra el italiano Ciro Immobile (36) y el polaco Robert Lewandowski (34) hasta la última jornada por la Bota de Oro.

La temporada siguiente lo tuvo al portugués fuera de las canchas por varias semanas tras contagiarse de Covid precisamente. Terminó la campaña liguera con 29 goles, ganando el premio Capocannoniere al máximo goleador y convirtiéndose en el primer futbolista en terminar como máximo goleador en las ligas inglesa, española e italiana.

Para el comienzo de la 21/22, el atacante decidió volver a su primer gran amor. Con 37 años, volvió a ponerse la camiseta roja de Manchester United para tratar de devolver a los primeros planos a un equipo que no se parecía en nada a lo que él dejó casi 10 años atrás. La semana pasada, cuando le anotó un triplete a Tottenham, llegó a los 807 goles y superó a Josef Bican como el máximo goleador de la historia del fútbol profesional.

Sin embargo, el equipo pelea por entrar a las competencias continentales de la temporada que viene, mientras que el martes se despidió de la anhelada Champions en octavos de final jugando como local ante el Atlético Madrid, terminando la competencia con 6 goles. Desde su regreso lleva 18 goles en 32 partidos. Uno de los mejores deportistas de los últimos años no ganará un trofeo luego de doce temporadas consecutivas alzando por lo menos una copa entre sus manos.