El presente de Alejandro “Papu” Gómez estuvo marcado por contrastes extremos. De formar parte integral de la Selección Argentina campeona del mundo y compartir intimidades con Lionel Messi, pasó a vivir una situación desafortunada tras ser sancionado por dopaje, alejándolo del equipo nacional.

Recientemente, el “Papu” realizó una aparición pública en la que detalló su rutina de entrenamiento en solitario mientras aguarda con impaciencia su regreso al fútbol profesional. A sus 36 años, demuestra una gran determinación al considerar que aún tiene mucho por ofrecer en el deporte. A pesar de saber que su vuelta a las canchas está prevista para finales de 2025, mantiene viva la llama de la competencia.

“Seguro sea por Italia o por España, no creo que cambie mucho. Hay que elegir un buen club o ciudad para vivir con la familia y tratar de disfrutar los últimos años de fútbol. Siempre me mantuve bien, nunca tuve muchas lesiones y me cuido mucho. Todavía unos años más puedo jugar”, manifestó Gómez en diálogo con Deportes CMM.

Papu Gómez se consagró campeón del mundo con la Selección Argentina en 2022.

De ser campeón del mundo con la Selección Argentina a dar positivo en doping

La carrera de "Papu" Gómez dio un giro inesperado en los últimos meses. De celebrar el Mundial de Qatar 2022 con la Selección Argentina y vivir su mejor momento futbolístico, el mediocampista se vio envuelto en una polémica por doping que lo alejó de las canchas.

La FIFA anunció en octubre de 2023 una sanción disciplinaria contra el jugador debido a un resultado adverso en un control antidopaje. Las investigaciones determinaron que la sustancia prohibida había sido consumida por el jugador mientras vestía la camiseta del Sevilla, con anterioridad a su participación en la Copa del Mundo.

La pena impuesta a Gómez fue de dos años de suspensión. Este hecho se produjo en un contexto en el que el futbolista había sufrido una ruptura en su relación con el plantel de la Selección Argentina, cuyos motivos permanecen desconocidos. Además, Lionel Scaloni determinó no convocarlo de manera abrupta.