Hablar de Rodrigo de Paul inexorablemente es hablar de Racing Club. El volante es el futbolista número 50 de los 112 surgidos del Predio Tita, esa inagotable cantera de talentos racinguistas, desde principios del año 2000 hasta esta parte. Siempre que puede el "Motorcito" va a ver a la "Academia" adonde juegue y el martes no fue la excepción.

Aprovechando sus vacaciones y un momento libre antes de la actividad que tendrá con la Selección Argentina, De Paul miró las alternativas de la goleada del equipo de Gustavo Costas y expresó una vez más su cariño hacia la institución mientras era reconocido por la comisión directiva de la institución: "Yo salí de este club. Que me reconozcan es hermoso. Uno intenta ser un embajador de este club y representar los valores que uno aprendió en Racing", destacó el mediocampista.

En ese sentido, el mediocampista surgido de las divisiones inferiores del club rememoró sus días desde lo previo a lo que fue su debut en primera y aquellas sensaciones que le causaba ir a ver al conjunto celeste y blanco: "Venía a la cancha y me enamoraba la gente. Lo más importante es que tengamos mucho amor por este club y esta camiseta".

Sin fijarse fechas y sin hacer ninguna promesa respecto a lo que podría ser un retorno al club donde todo empezó, De Paul remarcó su pertenencia hacia la institucion que lo cobijó en sus primeros días: "Para mi es una alegría inmensa el cariño que me brindan".

Y para cerrar dejó un mensaje para todos los hinchas de Racing que se acercaron al Estadio Ciudad de Lanús y lo llenaron de su cariño: "Ellos saben que soy de esta casa. Siempre que me voy o no estoy cerca saben que mi corazón está acá y eso es lo importante".