(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) La Selección Argentina cerró la última gira antes de entregar la lista de convocados para una nueva Copa América que se disputará a mitad de año en Brasil. El conjunto nacional superó a su par de Marruecos por 1-0 con gol de Correa a minutos del final. El equipo de Scaloni no pudo encontrar la vuelta a un partido que parecía más sencillo de lo que fue realmente. Durante todo el duelo, no hubo 22 protagonistas como suele haber en el fútbol, sino que hubo uno más que influyó muchísimo en el juego. 

El viento que corrió en el Estadio de Tánger fue muy fuerte y según los que se encargan de medir la velocidad, las ráfagas fueron de 50 km por hora. Esto modificó el trámite del partido ya que en cualquier pelota que iba por arriba volaba más de la cuenta. Incluso en una pelota parada había que ejecutarla con cierta rapidez porque el balón no paraba de moverse.

Durante los 90 minutos, el partido fue muy malo y no hubo un transcurso correcto por las condiciones climáticas y también por los jugadores ya que  se dedicaron a pegarse entre todos. Producto de esto se vio un partido muy cortado y en total entre los dos planteles cometieron 46 faltas, un número muy alto para un partido de selecciones.

Llegando al final del compromiso, llegó el único gol del partido en los pies de Ángel Correa que arrancó la jugada individual y con una buena pared con Matías Suárez, ingresó al área y luego de un enganche, cruzó el remate que no lo pudo contener de ninguna manera el arquero local. Con esta victoria, el elenco nacional cerró la última fecha FIFA antes de lo que será una nueva Copa América buscando alzarse con el trofeo luego de 25 años.