Buena predisposición de las delegaciones sudamericanas sobre las condiciones que solicitó el Gobierno argentino
Conmebol consultó a las otras nueve federaciones acerca de la viabilidad de cumplir con las exigencias que partieron desde Casa Rosada. Encontró buena recepción en los demás países. El 50% de las selecciones que disputarán la Copa ya fueron inoculadas con las vacunas Sinovac que consiguió el organismo o están en vías de estarlo. En los próximos días podrían sumarse Bolivia, Brasil y Colombia. Perú es el gran tema a resolver.
Contrarreloj. Así son las negociaciones entre Conmebol y el Gobierno Argentino para la realización o no de la Copa América en territorio nacional. Luego de la reunión que mantuvieron ayer autoridades del organismo sudamericano y autoridades del Ejecutivo encabezado por Alberto Fernández, este jueves Conmebol le consultó a las nueve delegaciones que disputarán el torneo sobre la viabilidad de cumplir con los protocolos que exigió el Gobierno argentino en el cónclave de ayer, en Olivos, tal como informó ayer Doble Amarilla.
Dentro de las mismas, se encuentra el pedido de reducir al mínimo las delegaciones, mantener la burbuja en entrenamientos, que no haya "día libre" y sí los hay que sean dentro de la concentración. Así como también que los desplazamientos sean sólo para viajar, entrenar y jugar. Además, claro, de cumplir con la condición, sin excepción, que todas las delegaciones lleguen vacunadas al menos con una dosis, tal como lo comentó esta mañana Santiago Cafiero.
Sobre este último punto, vale remarcar que, incluso antes del pedido-demanda del Gobierno nacional, ya Chile, Uruguay, Paraguay, Ecuador y Venezuela habían recibido las dosis de Sinovac y habían vacunado a su delegación o estaban en vías de hacerlo. Además, en las próximas horas también podrían vacunarse la delegación de Brasil, Bolivia y Colombia con vacunas propias de cada país.
El gran tema a resolver es Perú. La nación andina ya tenía todo listo para inocular a sus integrantes, pero el DT del equipo, Ricardo Gareca, tiró todo para atrás por no considerar "justo" que él y sus jugadores y compañeros del cuerpo técnico reciban la vacuna antes que población de riesgo o adultos mayores del Perú.