El arquero de Pilcomayo de Paraguay, Miguel Urquiza, dejó su puesto y se fue al ataque para convertir un golazo frente a 3 de Noviembre, a los 93 minutos del partido, lo que dio esperanza para no descender. Y, como si esto fuera poco, al último segundo tuvo otra igual y ¡casi lo hace!

Pilcomayo peleaba por mantenerse en la Primera B del fútbol paraguayo y una derrota lo depositaba en la última categoría. Iba perdiendo 1-0 cuando el árbitro adicionó 5 minutos más. 

Cuando restaban tan sólo dos para el cierre, Urquiza se fue al ataque y, con un zapatazo, convirtió el empate con su pierna izquierda, lo que hizo delirar a sus compañeros y soñar con un triunfo.

Cuando quedaban apenas segundos para el final, tuvo una oportunidad similar y se fue desviado por el bloqueo de un defensor, por lo que el encuentro terminó empatado y Pilcomayo no pudo sostenerse en la categoría.