Ferro-Quilmes y Almirante-Barracas: la mega llave de la Primera Nacional que se lleva todos los flashes
La Segunda División del fútbol argentino disputa su último boleto para ascender a la máxima categoría. De un lado, dos equipos de larga trayectoria y con campeonatos conquistados, del otro, dos instituciones de barrio que quieren meterse en la discusión. Doble Amarilla conversó con ex protagonistas de los clubes que ya tuvieron que definir en este tipo de instancias. Hablan Pablo Frontini, ex Ferro y Alejandro Orfila, campeón con el "Guapo" y el "Mirasol".
La Primera Nacional está que arde y son sólo cuatro los equipos que pelean por el segundo ascenso a la Liga Profesional del Fútbol (LPF). De un lado, Ferro Carril Oeste - Quilmes, dos equipos históricos del fútbol argentino y con trayectoria en la máxima categoría; del otro, Almirante Brown - Barracas Central, un cruce metropolitano de dos instituciones humildes que pisan fuerte en el fútbol.
El club de Caballito y el de zona Sur protagonizarán una "remake" de la batalla que tuvieron en el año 1982 por la final del Torneo Nacional. Al igual que en esta modalidad, se trató de un torneo ida y vuelta con clasificaciones por llave. En esa ocasión, fue ida en Quilmes y vuelta en Ferro, contrario a esta definición. La final de ese campeonato se la terminó llevando "Oeste" bajo la conducción técnica de Carlos "Timoteo" Griguol y con el histórico Gerónimo "Cacho" Saccardi. Fue ida 0 a 0 y vuelta 2 a 0, con goles de Miguel Ángel Juárez y Juan Domingo Rocchia.
Pero la tendencia fue cambiando en los últimos años. Mientras Ferro lleva más de 20 años en el Ascenco, Quilmes lleva varios años entre ascensos y descensos a Primera División.
En ese marco, por el lado de Ferro, diálogo con Doble Amarilla Pablo Frontini, ex marcador central y actual entrenador de Defensores de Belgrano. En su paso por el club que preside Daniel Pandolfi, jugó el Reducido del 2015, donde les tocó caer frente a Santamarina de Tandil.
"Creo que Tigre merecídamente logró el primer ascenso por ser el mejor, además de contar con un gran cuerpo técnico. Después, creo que en la eliminatoria de Ferro y San Martín de Tucumán se enfrentaban los dos equipos que mejor semestre habían tenido, fue una final adelantada. Veo a Ferro muy bien, me parece que está un escalón por encima de los otros tres. Sin embargo, Quilmes ha hecho un gran campeonato, Barracas mantuvo cierta regularidad y Almirante, con algunos problemas, terminó de una buena manera. Pero creo que Ferro es el que está un paso arriba de todos", declaró.
Frontini también tuvo como entrenador la posibilidad de ascender con San Telmo a la Primera Nacional y de disputar varios duelos de Copa Argentina. En ese marco, respondió acerca de si esta clase de partidos se plantean de otra forma: "Sí, cambian. Primero que es una eliminatoria, donde son 180 minutos y las localías influyen, más allá de que no hay ventaja deportiva. Arrancar ganando el primer partido condiciona el segundo por una cuestión lógica y de estrategia. Son partidos que no tienen muchos secretos, es mucha concentración, corazón y deseo de ganar. Se deben asumir y correr riesgo".
"Lo que debe tener un equipo para ser campeón es tener un objetivo muy claro y un deseo de ganar. Cuando todo va encaminado, normalmente las cosas suceden, y creo que eso le ocurrió a Tigre. Ahora lo mismo, son equipos que todos están pasando un buen momento. El que lo pueda sostener y el que juegue con menos presión a la hora del partido, es el que se va a llegar el segundo ascenso", concluyó el experimentado ex jugador y flamante entrenador del "Dragón".
Otro que charló con Doble Amarilla y que también tiene experiencia es Alejandro Orfila, ex jugador campeón con Almirante Brown en 2007 y con Barracas Central en 2010, además de que fue entrenador de Ferro y estuvo cerca de clasificar a un Reducido. Además, también ascendió a Atlanta a la Primera Nacional y lo hizo competir hasta el final durante la temporada del 2020.
En cuanto al balance de ambos equipos, manifestó: "Es el fiel reflejo de lo que ha sido el torneo, que en la última fecha, en ambas series, había varios equipos con las mismas posibilidades. No recuerdo tanta paridad y competitividad en un torneo de cualquier país o categoría. Por ende, la sensación es de mucha expectativa".
"Si analizás los cuatro que quedan, Almirante lideró gran parte del torneo, Barracas lo mismo, Quilmes supo estar tramo a tramo hasta el último partido (con pérdidas de futbolistas muy importantes) y Ferro tuvo un sprint final muy bueno que si Barracas no ganaba el último partido, ganaba su zona. Esto quiere decir que con distintas formas de jugar, hoy son los mejores. Obviamente no podemos dejar de lado el excelente año que han tenido los que quedaron eliminados", agregó.
El ex áspero volante central y actual entrenador, que también casi logra hacer ascender a Comunicaciones en el polémico frente a Deportivo Riestra, donde fueron perjudicados, coincide en la idea de Frontini acerca de que estos duelos tienen un condimento muy particular. "Sin dudas que cambian. En base a la experiencia, que me tocó conducir grupos en estas instancias, lo más importante es lo psicológico de los futbolistas que se sobreponen a cualquier situación técnico-táctica, que se preparan más acentuando a lo emocional", explicó.
Y por último, consideró que un equipo campeón, en estas instancias, "debe haber demostrado en todo el año sus cualidades individuales y colectivas, sumado a que se requiere de mucho temple, coraje, ambición y jerarquía emocional".