Fin de semana de terror en el fútbol regional cordobés
Se produjeron graves incidentes en tres partidos que se disputaron durante el fin de semana.
Tres juegos correspondientes a diferentes ligas del interior de Córdoba terminaron con graves disturbios. Varios detenidos, destrozos, jugadores heridos y uno que permanece internado en terapia intensiva, el saldo.
El primero de los cruces tuvo lugar en la Liga de Punilla, donde se enfrentaron Atlético 25 de Mayo y Atlético La Falda. Según consignó un directivo, todo sucedió cuando se retiraban del campo de juego. "Adragna (el 10 de La Falda) caminaba detrás del grupo cuando a la carrera apareció un jugador contrario y lo golpeó muy fuerte, derribándolo. Allí se sumó al menos un ayudante del equipo técnico que también pateó al jugador caído".
El jugador fue atendido de urgencia en el lugar y, tras 15 minutos, fue trasladado al hospital local y luego al regional Domingo Funes. Como el tomógrafo no estaba en funcionamiento, Adragna fue derivado a una clínica de La Falda donde quedó internado en terapia intensiva.
El segundo se dio en Valle Hermoso: empezó en la tribuna y terminó en el hospital
Racing recibió a Sportivo Brasil de Carlos Paz, pero el encuentro no tuvo cierre. A los 10 minutos del segundo tiempo, se enfrentaron las hinchadas de ambos clubes y todo finalizó en un escándalo.
Hubo piedrazos y daños en la infraestructura del club. Cuando intervino la Policía, los hinchas agredieron a los efectivos y provocaron destrozos en los móviles y otros vehículos. Y los disturbios no terminaron ahí.
Los protagonistas del incidente continuaron la pelea en las instalaciones del Hospital de La Falda, donde estaban siendo atendidos algunos de los heridos. Allí dañaron un dispenser y rompieron varios vidrios.
Por todos estos hechos, la Policía detuvo a tres personas pertenecientes al club carlospacense. Fueron imputados y quedaron a disposición de la fiscalía de Cosquín.
El clásico de Marcos Juarez terminó con varias peleas:
San Martin y Argentino también concluyó con peleas entre los jugadores del local, el árbitro Emanuel Murúa y los jueces de línea. Tuvo que intervenir la Policía dentro del campo de juego. Los agresores fueron identificados.
El árbitro y su asistente Alejandro Ponce sufrieron lesiones leves. Fueron informados a la Liga Cañadense dos integrantes del cuerpo técnico y tres jugadores del club San Martín.