El fútbol chino se autofrena: piensa en un tope salarial
Son muchas las estrellas que recalaron desde Europa y Sudámerica en esa liga asiática. ¿El atractivo? Los millones y millones de euros o dólares sobre la mesa. Sin embargo, todo eso podría terminar. El gobierno de esa nación cree que los gastos desmedidos de los clubes "dañan" el plan de desarrollo del fútbol local.
(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) Carlos Tevez, Javier Mascherano y Andrés Iniesta son los últimos tres casos. Pero el fútbol chino viene llevándose estrellas de Europa en sus últimos años de carrera y promesas de Sudámerica a fuerza de millonadas puestas sobre la mesa. Sin ir más lejos, al "9" de Boca lo tentaron con USD 80 millones de dólares por dos temporadas y a "Don Andrés" le pusieron más de €100 millones, por todo concepto (ver aparte). Pero todo eso está por terminar.
El gobierno chino está a punto de hacer estallar la burbuja. Asegura que esas erogaciones y las estrellas que pululan en la liga asiática atentan, directamente, contra el desarrollo del fútbol local e impulsan un "tope salarial", algo similar a lo que ya ocurre en la NBA y a lo que la UEFA intenta con su "Fair play Financiero".
El tema que ese dinero, si bien real, después genera profundas crisis económicas en los clubes. Ante ese panorama la liga China, planea el mencionado "Tope salarial". Según informó el diario oficial "China Daily", y el mismo equivaldría a un 75% de los ingresos anuales de cada club.
Según se pudo saber, esta posibilidad se discutió en la última reunión de ejecutivos de Primera y Segunda división de la liga y podría aplicarse a partir de 2021, dando a los clubes dos años para limpiar cuentas, pulir números y adaptarse a la nueva situación.
Más allá que la Liga China aparece como el que impulsa esta medida, lo cierto es que el tirón de orejas llegó desde arriba. La medida respondería a las presiones de la Administración General de Deportes de China, después de años de mediáticos y costosísimos fichajes.
Los gastos de los clubes se han convertido en deficitarios. El vigente campeón nacional, el Guangzhou Evergrande, el año pasado registró USD 83 millones de ingresos, pero sumó pérdidas por USD 155 millones.
Otro factor que preocupa al gobierno Chino es que cree que estas finanzas dificultan el plan nacional de desarrollo del fútbol patrio, cuya meta es lograr que China sea una potencia a mediados de este siglo.