Se produjo una venta récord de televisores en Argentina por Rusia 2018
Una venta de 2.42 millones en seis meses proporcionó los mejores números en la historia de este mercado, impulsados por la competencia mundialista.
(De la Redacción de DOBLE AMARILLA) Si bien el Mundial de la Selección Argentina en Rusia fue una decepción, los fabricantes de televisores celebran la mayor venta de pantallas en la historia del mercado.
Según un informe del diario Clarín proporcionado con datos de la Federación de Comercio e Industria de la Ciudad de Buenos Aires (Fecoba), entre enero y junio de 2018 se compraron en el país a un ritmo frenético de 13.371 por día, con un total de 2,42 millones. Esta cifra se presenta un 37% mayor al mismo período del año pasado, 51% más a lo sucedido en Brasil 2014 (1,60 millones) y 41% mayor al de Sudáfrica 2010 (1,72 millones).
“Los primeros seis meses de 2018 marcaron un nuevo récord para las ventas de televisores en Argentina”, aseguró el informe de Fecoba proporcionado con datos de la consultora Claves Información Competitiva.
Ante las causas de esta cifra récord, desde la entidad empresaria explican que las mayores facilidades para la importación de productos electrónicos derivaron en una mayor oferta de equipos, que “se tradujo en menores precios y descuentos más agresivos a lo largo de la cadena”
En este informe agregaron que “la situación de dólar relativamente barato que imperaba en la Argentina hasta que se desató la crisis cambiaria de mayo”. Y concluyen: “El dinamismo que mostró el crédito al consumo a través de tarjetas y préstamos en el primer semestre le brindó al consumidor el financiamiento para comprar antes de que aumentaran los precios”.
Si bien todas las marcas hicieron una fuerte inversión en publicidad para esta Copa del Mundo, las ventas se concentraron en Samsung (12,8%), Philips (12,5%), Noblex (10,9%), LG (10,8%) y, algo más lejos, Hitachi (4,4%).
No obstante, a pesar de la venta récord, en los negocios quedaron aparatos disponibles y con la ausencia de Mundial, pero sobre todo, la recesión económica, la inquietud por venderlos crece de cara al futuro. Las promociones agresivas parecen una opción para liquidar lo que resta.