La fiscal de los eventos masivos de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), Celsa Ramírez, dejó su cargo. La abogada misionera ahora se dedicará a una unidad especial, denominada Delitos Complejos. Maximiliano Vence la reemplazará en su puesto.

La Dra. Ramírez intervino e inició numerosas causas que estaban vinculados con clubes porteños. Su gran historial lo tuvo con Boca, a tal punto que el presidente del club, Juan Román Riquelme, la acusó de “tener un problema con todos los hinchas de Boca”. “Esta persona mandó a declarar a mi hijo durante la pandemia, no sé si tiene un problema contra los Riquelme, porque también mandó a allanar la casa de mi hermano”, agregó el máximo dirigente de la institución boquense. La fiscal también clausuró la Tribuna Sur Alta de La Bombonera en una oportunidad por supuestos “problemas de derrumbe”, entre otras medidas.
 

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Ramírez, nacida en Misiones, estudió Derecho en la UBA, se recibió en 1997 y en 2014 juró como fiscal durante el segundo gobierno de Mauricio Macri en la Capital Federal. Su historia judicial no tiene solamente a Boca como principal apuntado. La fiscal también inició causas contra barrabravas por hechos de violencia y reventa de entradas, entre otros ítems.

Maximiliano Vence será quien quede en la órbita de lo deportivo, además de otros espectáculos. Estuvo a cargo de la causa de amenazas contra Rodolfo D’Onofrio, expresidente de River, y lideraba, hasta hace algunas horas, la Fiscalía Penal Contravencional y de Faltas N°8.