De la ilusión al ocaso: Vélez y un cierre de temporada agitado en el que no juega por nada
El conjunto de Liniers proyectaba un año con posibilidades de protagonismo. Pero no llegó a instancias definitivas en la Copa de la Liga ni en el Torneo de Primera División. Flamengo lo humilló en su propio estadio e Independiente lo eliminó de la Copa Argentina. Queda una recta final de campeonato en el que sólo podrá aspirar a salir del fondo.
El año de Vélez se proyectaba bastante diferente a lo que termina siendo en el cierre de esta temporada, en la cual se lo encuentra sin chances en el torneo local, sin haber sido protagonista en la Copa de la Liga, afuera de la Copa Argentina, eliminado de la Copa Libertadores y con prácticamente un trimestre por jugar sin tener absolutamente ningún otro aliciente que tratar de salvar el año y no tener una campaña que lo vea en las últimas posiciones de la Liga Profesional de Fútbol.
Quizás el momento en el cual la institución de Liniers llegó a su pico de rendimiento fue en aquella serie ante River, válida por octavos de final de la Copa Libertadores, en la cual el equipo de Alexander 'Cacique' Medina pudo eliminar al de Marcelo Gallardo y darle el gran golpe del año a la escuadra del 'Muñeco'.
No obstante, y más allá de haber eliminado a Talleres por un ajustado margen en una llave con tono argentino, Vélez no ha sido competitivo ante Flamengo fue humillado en su propia cancha en la instancia de ida de la semifinal, y luego eliminado en Río de Janeiro mostrando quizás una imagen digna de visitante. Pero fuera de toda posibilidad de competir de igual a igual contra el último subcampeón de la preciada competición internacional.
En lo que hace a la competición local, en la Copa de la Liga (que se jugó durante el primer semestre del año) el pasaje de Vélez por la misma fue bastante pobre. En las 14 fechas disputadas, tan solo pudieron sumar 18 puntos. El saldo fue de cuatro victorias, seis empates y cuatro derrotas, con 13 goles a favor y tan solo 12 en contra. Como consecuencia no pudo clasificar a la instancia de eliminación directa, ya que terminó siendo el sexto de su grupo y solo los primeros cuatro podían disputar dicha instancia, por lo que quedó eliminado prematuramente en la primera competición del año para el 'Fortín'.
En el actual torneo, el balance es demoledor. De los 28 equipos que compiten a nivel local, el 'Fortín' está en el puesto número 26. El conjunto del 'Cacique' sumó tan solo 13 unidades en las 18 fechas que lleva disputadas. Tan solo ganó un partido, empató 10 y cayó en los siete que completan la estadística, anotando 19 goles a favor y recibiendo 25 goles en contra. Está a tan solo dos puntos del colista Lanús en un andar que, si bien puede tener cierta justificación en privilegiar la Copa Libertadores, está bastante lejos de lo que una institución como la de Liniers exige.
Sí vamos a la tabla anual, en definitiva la que clasifica a la Copa Libertadores del 2023 y que es un gran muestreo de lo que fue el año calendario para cualquier institución, el andar de Vélez es demasiado pobre. Tiene apenas 31 unidades en lo que va del año. En estos 32 encuentros que se han disputado en 2022, solo ganó cinco encuentros, empató en otras 16 oportunidades, y cayó en once encuentros. Tan solo noto 32 goles a favor, y recibió 37 en contra.
Vélez se ubica en el puesto número 26, apenas cinco puntos por encima de Lanús quién es el conjunto que peor ha hecho las cosas a nivel local en lo que va de este año calendario. Una muestra de lo decepcionante que ha sido este ciclo.
Además el andar en la Copa Argentina, quizás la última esperanza que le quedaba al Fortín para poder clasificar a la Copa Libertadores (y porqué no, para salvar el año) ha sido bastante errático. Más allá de haber llegado a instancias de octavos de final, cayó ante Independiente sin objeciones y quedó al margen de la única competencia en la que podía aspirar a poder consagrarse. Y con un trimestre por delante en el cual la institución de Liniers va a jugar por muy poco.
El mercado de pases tampoco le trajo demasiadas satisfacciones al conjunto velezano, con más de €7 millones de inversión entre compras y cargos de préstamos. Futbolistas como Sosa Sánchez, Joel Soñora, Emanuel Insúa o el renombrado Diego Godín pasaron sin pena ni gloria en esta etapa. En Santiago Cáseres se invirtieron más de €2 millones y la mayoría de los encuentros fue suplente, salvo lesión o suspensión. En idéntica situación están Jonathan Menéndez y José Florentín. Solo Walter Bou se consolidó como un jugador importante en la estructura de Medina, justificando la enorme apuesta económica puesta en él.
En lo que hace a los líderes desde el banco también fue un año de sobresaltos. Vélez comenzó el año con un proyecto ambicioso, pero Pelegrino debió irse a finales de marzo. Cuando todo parecía naufragar y el 'Fortín' corría riesgo de quedarse eliminado en la fase de grupos de la Copa Libertadores, Julio Vaccari (entrenador de la Reserva) fue el piloto de tormentas que salvó esa etapa. Pero la dirigencia velezana le bajó el martillo y fue por un nombre más estridente: Alexander 'Cacique' Medina.
El ciclo del entrenador uruguayo, de olvidable paso por el Inter de Porto Alegre pero con buen ciclo en Talleres, fue noticia más por cuestiones extradeportivas que por lo futbolístico. Peleas con sus colegas, la insólita patada a Matías Ramirez (“Por instinto uno le puso el pie”, se justificó) jugador de Godoy Cruz, y el papelón del estado del José Amalfitani para recibir a Flamengo (que no lo salvó de la humillación a la que lo sometió el elenco carioca) son hechos que, sumados a la decepcionante campaña, ponen en la cuerda floja al uruguayo.
Solo quedará Vélez con el objetivo de estar más cerca de la mitad de la tabla. Teniendo en cuenta lo que han sido los últimos años de la institución, la proyección de los chicos de inferiores, y el presupuesto que ha invertido el 'Fortín' en poder tener un buen año, son objetivos demasiado chicos para el equipo de Villa Luro. A todas luces, quizás el equipo decepción del año.